Lo que hace falta en los nuevos brazos del Distribuidor Juárez es señalética informativa, preventiva y restrictiva que marque los límites de velocidad y las normas de tránsito, pero aún es muy pronto para evaluar los resultados, advirtió el urbanista de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, Benjamín Alva.
En entrevista, el académico explicó que en el Distribuidor Juárez, como en toda vialidad de su tipo, la velocidad es mucho más controlada, pero como parte de la señalización vial se tiene que comunicar con eficiencia el límite de velocidad y cualesquiera indicaciones para conducir correctamente, porque como en cualquier vialidad, la infracción a los límites de velocidad puede ocasionar accidentes viales.
Benjamín Alva explicó que como en toda obra nueva, en los nuevos brazos viales se tiene que generar una cultura de comunicación y en particular sobre el uso del espacio público, tal y como ha sucedido en otras obras.
Recordó que por ejemplo el bulevar del Río Santiago y la ampliación de los pasos a desnivel en la Avenida Prolongación Muñoz llevan a nuevas formas de convivencia y por ello, es importante irse adecuando a las nuevas formas de hacer las cosas con el brazo del distribuidor vial.
El entrevistado explicó que de acuerdo al número de vehículos que circulan por el distribuidor vial, el flujo tendría que ser muy controlado y considerar la señalización vial.
Precisó que de repente sí es complicado si no hay una señalización vial que recuerde las formas de conducirse, pues “es complicado desenvolverse en una vía rápida con un punto de encuentro para ceder el paso entre un vehículo y otro”.