La obra sería construida en un predio cercano a las dos localidades. A decir de los inconformes, representa un foco de contaminación, pues las aguas residuales desembocarían en tierras de cultivo y hortalizas.
“Nosotros ya fuimos con Conagua, con el Oficial Mayor de Gobierno del Estado, y nos dijeron que era proyecto del Gobernador, ya fue personal de Salubridad y nos dijeron que eso no está bien ahí por cuestiones de salud. En las tierras se siembran maíz, ajo y frijol”.
El proyecto perjudicaría a cerca de ochocientos habitantes de Estación Justino y El Bravo. Explicó que aunque en reiteradas ocasiones han buscado el apoyo de las autoridades, la respuesta ha sido nula, e incluso han recibido amenazas por parte de las mismas, en el sentido de que en caso de que los afectados eviten que se realice la obra, les suspenderían el servicio de agua potable.
La obra arrancaría este miércoles, por lo que los pobladores acudirán al sitio donde se desarrollará, para intentar frenar los trabajos, lo que podría desatar la violencia.