La visita de Luisa María Alcalde, presidenta nacional de Morena, programada para este martes 5 de agosto en San Luis Potosí, fue señalada por partidos de oposición como una estrategia político-electoral basada en el presunto uso indebido de programas sociales y afiliaciones simuladas.
Desde el PRI, su dirigente estatal Sara Rocha Medina advirtió que los comités seccionales que Morena impulsa podrían funcionar como una estructura paralela a la Secretaría del Bienestar, lo cual calificó de ilegal y peligroso para la equidad democrática.
Rocha acusó a Morena de carecer de estructura partidista formal y de "colarse" mediante programas sociales, aprovechando la necesidad de la población. Señaló que los servidores de la nación, financiados con recursos públicos, están promoviendo casa por casa la afiliación a Morena.
También criticó el discurso de Alcalde sobre perfiles vinculados al crimen organizado:
"En lugar de decir que no están involucrados, deberían exigir que se investigue. El país necesita seguridad".
Desde el PAN, el secretario general estatal Enrique Dahud Uresti sostuvo que la visita de la dirigente es una respuesta al avance opositor y forma parte de una estrategia de reposicionamiento tras la reciente visita del líder nacional del PAN, Jorge Romero.
Dahud también puso en duda las cifras de afiliación que presenta Morena: aseguró que no coinciden con los datos oficiales del INE, y que muchas personas solo se inscriben para recibir apoyos sociales, no por convicción partidista.
"Esta visita no es solo organizativa, es una reacción al avance del PAN en el estado", concluyó.
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