Pese a contagios, miles acuden a tianguis y plazas

Sin medidas de seguridad, potosinos abarrotan Las Vías, Centro Histórico y plazas

Como si nada ocurriera y a pesar de que continúa al alza los contagios de Covid-19 en la entidad,  miles de comerciantes ambulantes, clientes y visitantes abarrotaron calles y plazas del centro de la ciudad, así como en la avenida Hernán Cortés, en el tradicional tianguis de Las Vías. 

Otra vez prevalecieron las faltas las medidas de seguridad sanitaria, y abundaron los clientes y comerciantes que no usan cubrebocas o que no tienen disponible gel antibacterial ni ninguna otra medida de prevención.

Ayer las autoridades sanitarias estatales reportaron 991 nuevos contagios tan sólo en las 24 horas anteriores y 13 personas fallecidas por el virus, en tanto la entidad se ubica todavía en quinto lugar nacional con más casos activos por cada 100 mil habitantes con 5 mil 591, San Luis Potosí se encuentra actualmente en naranja, a pesar de que se encuentra  muy por arriba de estados en semáforo rojo como Nuevo León, Tamaulipas, Hidalgo, Guerrero y Puebla.

En el Centro Histórico, los comerciantes ejercieron su trabajo sin atender ninguna medida de prevención, y ofreciendo sus mercancías en forma libre. 

En la calle Hidalgo, la mayoría de los vendedores portaban algún cubrebocas, pero en la vía pública ni siquiera hay control del distanciamiento de personas, se rompe el orden y la proximidad es exactamente la misma en el caso de los domingos de comercios establecidos abiertos. 

Otra vez, aparecieron familias enteras con niños y jóvenes sin cubrebocas, condición en la que incluso hubo personas de la edad adulta mayor.

Mientras que en las principales plazas de la ciudad, cientos de potosinos desatendieron las medidas de restricción establecidas por la Unidad Municipal de Protección Civil de la capital en las plazas principales de la ciudad. 

Como ha ocurrido con los anteriores picos de pandemia y los semáforos rojos por contagios, trabajadores municipales colocaron cintas en las bancas, para evitar la llegada de parejas de novios y familias con personas mayores que pudieran sentarse.

Los propios usuarios de las bancas rompen las cintas y se sientan a esperar por ejemplo a sus parejas o nada más a descansar, mientras frente a ellos pasan miles de personas con o sin cubrebocas. Es frecuente encontrar en las bancas, personas que no sólo rompieron las cintas, sino que conviven sin distanciamiento y sin cubrebocas.