La llegada del frío de diciembre le abrió al comercio informal la posibilidad de mejorar substancialmente sus ingresos. En diferentes plazas y cruceros del Centro Histórico, ya se instalaron puestos de ropa invermal en los que, además, se venden prendas con motivos navideños.
Algunos de estos puestos, como ya es costumbre de los informales, se sitúan en puntos de cruce intenso de peatones reduciendo el área de tránsito de las personas y obligándolas, en ocasiones, a bajar al riesgoso arroyo vehicular.
En un recorrido hecho ayer, martes, se pudieron apreciar puestos de ropa invernal en las esquinas aledañas a la Plaza de los Fundadores, Plaza de Armas, en la zona peatonal de Ignacio Zaragoza, en las esquinas de la Plaza de El Carmen y alrededor del jardín de San Juan de Dios.
Los responsables de estos puestos venden, principalmente, guantes, bufandas y gorros de temporada, además de suéteres y algunas chamarras.
En general, las prendas no son de alta calidad y sus dependientes afirman que son confeccionadas en México, aunque se sabe que el comercio informal introduce al mercado local numerosas prendas chinas porque éstas dejan un mayor margen de ganancia.
Como sea, para las y los consumidores sigue siendo una mejor opción comprar ropa en comercios establecidos en los que sí se ofrecen garantías de cambio o devolución de la mercancía. De todos modos, los informales venden prácticamente al mismo precio, pero sin garantías de ningún tipo.