La calle de Madero en el tramo que se ubica entre Tomasa Esteves y Uresti se asemeja a un queso gruyere, en donde los hoyos se convirtieron en la constante.
De acuerdo a vecinos de la zona, los enormes baches que se encuentran en el lugar han complicado la circulación de las unidades motoras, razón por la que es indispensable que las autoridades encargadas tomen cartas en el asunto y reparen el desperfecto.
Irma Rodríguez quien transitaba por el lugar, señaló que para los conductores es complicado circular por el lugar, pues los constantes baches hacen que cualquier unidad frene su paso, a fin de evitar daños a la suspensión de su vehículo.
Señaló que las personas que diariamente transitan por la zona se quejan de las malas condiciones de la arteria.