En una escena que parece sacada de un cuento ferroviario, el Pasaje Hidalgo de nuestra ciudad se ha transformado en un espacio donde la magia del tren cobra vida. Una fotografía capturada por la lente de Alberto Martínez nos muestra el ingenioso diseño de uno de los puestos ubicados en el andador central del Pasaje Hidalgo casi esquina con la Plaza de Armas.
El motivo de esta transformación es el reciente furor desatado por "la Emperatriz", una locomotora que ha conquistado la atención y el corazón de los habitantes de los tres países por los que ha pasado. Ahora, ese encanto ferroviario se traslada al corazón de nuestra ciudad, donde este puesto de revistas ha adoptado la forma de un tren, como si estuviera listo para avanzar hacia los transeúntes que, sorprendidos, viven la euforia del ferrocarril.