Recuerdan a “Sax” en su casa de SGS

El saxofonista de Maldita Vecindad vivió su infancia en la colonia San Felipe

La casa de “Sax”, Eulalio Cervantes Galarza, en Soledad de Graciano Sánchez, se convirtió en un escenario de altares y fotografías de recuerdo, flores y rezos.

La Maldita Vecindad y los Hijos del Quinto Patio, grupo en el que el músico inició con sus inclinaciones de ejecuciones de notas inmortales, se convirtió en un bendito recuerdo.

Y es que el saxofonista de la legendaria banda, dejó en su municipio de origen, anécdotas memorables entre sus amigos, vecinos y familiares que lo vieron crecer en su carrera titánica.

Los recuerdos del saxofón en “Pachuco”, se entremezclan con un Cristo, arreglos de flores amarillas, blancas y verdes, veladoras, y una pequeña caja de regalo, con la figura del saxofonista intérprete de canciones que ahora tocan con orgullo los que andan de “Pata de perro”, interpretando sin vacilar las canciones del grupo de lenguaje peculiar, a cambio de unas monedas.

Un bolso de colores beige y rosa, recuerda en el altar cuando una pareja se vuelve a enamorar en la pista, al son del baile “Kumbala”.

Los “hijos del quinto patio”, con seguridad recuerdan en paralelo a su compañero saxofonista, vencido por el coronavirus Covid-19, y al mismo tiempo que lo hacen con una cruz de flores, los vecinos de la humilde casa donde vivió el hombre que imprimió con su saxofón, el estilo propio de “Maldita Vecindad”.