Rinden homenaje a veterano rielero

“Había mucha gente pobre, pero todos necesitaban usar el tren”, es como don Manuel Hernández Álvarez, antiguo maquinista, expresa sus recuerdos de más de 47 años al servicio de Ferrocarriles Nacionales de México.

El Museo del Ferrocarril fue el escenario de un homenaje a su persona y sus 99 años de edad cumplidos el sábado, y para él, hay posibilidad de impulsar la economía si se reactiva el tren de pasajeros.

Antes, el potosino casi centenario, se convirtió en el único ferrocarrilero longevo que fue junto a la locomotora “La Emperatriz”, en todo el trayecto desde Canadá hasta la Ciudad de México.

Dijo que a lo largo de todo el recorrido de los trenes, se ve que hay mucha gente pobre, pero que todos necesitaban usar el tren y se iban y llegaban a su lugar en uno de los servicios más baratos.

“En sus rostros, a ellos los veía felices, porque le gustaba andar en el tren, viajar, regresar y volver a ir”, dijo después del homenaje que le organizó el secretario general de Jubilados de la Sección 24 del Sindicato de Trabajadores Ferrocarrileros de la República Mexicana (STFRM-24), Carlos Calderón Otero.

Recuerda que la gente usaba el tren con gusto y con ánimo y que impactaba de forma muy positiva en la gente pobre.

En sus relatos recuerda aquellas veces que trabajaba en el tren, ya tarde, por estar esperando algunos pasajeros que no llegaban y los esperaban para evitar que se fuera el tren sin ellos y las largas horas del día que tejieron miles de anécdotas de los ferrocarriles rumbo a Tampico, Aguascalientes, Chihuahua y hacia el norte de San Luis Potosí. 

LA BONANZA ECONÓMICA

Don Manuel recuerda que el tren de pasajeros es clave para el desarrollo de las comunidades, se le quedó en la memoria que había mucha gente que andaba en el ferrocarril con el fin de ganar dinero, vendiendo o comprando algunas cosas, y había poquito comercio, pero de clientes seguros.