Hace 25 años que los tianguis dominicales de la avenida Hernán Cortés no presentan el volumen de ventas de aquellos 22, 23 y 24 de diciembre, cuando la mayor parte de los comerciantes acabaron la totalidad de las mercancías e incluso dejaron abandonadas centenares de cajas vacías, en las que cargaban ropa por toneladas.
Ahora, las ventas son muy bajas y algunos apenas obtienen los ingresos para pagar las mercancías que son el origen de sus deudas.
El tianguis de las vías se instaló como cada domingo pero en vísperas de la Nochebuena, creó sus propios escaparates de exhibición, principalmente de vendedores de ropa, a la manera de los tianguis originales de la primera mitad de la década de 1990.
Sin embargo en diciembre de 1994, los tianguistas reportaron ventas copiosas e inusuales por el flujo de dinero de entonces. Los clientes por igual se llevaban varias prendas en un solo puesto venta y así sucedió con los vendedores de mezclilla, chamarras, sudaderas, ropa casual y ropa formal, juguetería, bisutería, productos diversos de importación y hasta producciones musicales
Los negocios de comida principalmente compuestos por taquerías del tianguis también vaciaron sus negocios por las enormes ventas de aquellas fechas.
En diciembre de 1995 las ventas se contrajeron. Apenas el día 20 de diciembre de 1994, el entonces presidente de la república Ernesto Zedillo Ponce de León anunció una grave crisis económica según el provocada por las herencias del ex presidente Carlos Salinas de Gortari.
El sueño del país económicamente apto para sobrevivir se había derrumbado. El dólar aumentó hasta tres veces su valor y progresivamente la gente dejó de consumir en espera del grave problema económico que se avecinaba.
La economía ya no se recuperó hasta la fecha.