LONDRES (AP) — El rey Carlos III planea recorrer un trayecto más corto y en un carruaje más cómodo hacia la Abadía de Westminster para su coronación, reduciendo la ruta que tomó su madre en 1953 en un intento por tener un evento más modesto que incluirá algunos toques modernos, informó el Palacio de Buckingham el domingo.
De todas formas, la ceremonia del 6 de mayo seguirá fundamentada en las tradiciones antiguas y adornada con ajuares reales de las joyas de la corona, pero también contará con su propio emoji personalizado, un reflejo de la primera coronación británica en la era de las redes sociales. La coronación de la reina Isabel II fue la primera en ser transmitida por televisión hace 70 años.
En un cambio con respecto a la tradición, Carlos y Camila, la reina consorte, saldrán del Palacio de Buckingham en el carruaje de Estado del Aniversario de Diamante, de color negro y tirado por caballos, que fue construido para el 60mo aniversario del reinado de Isabel. El vehículo cuenta con calefacción, aire acondicionado, ventanas eléctricas y un sistema de suspensión que proporcionará un recorrido más cómodo que el que tomó su madre para su coronación.
El trayecto de dos kilómetros (1.3 millas) es un poco más corto que el que siguió Isabel hacia la iglesia real. La procesión pasará a través del Arco del Almirantazgo; a lo largo de la Plaza de Trafalgar y una estatua de Carlos I, el monarca decapitado en 1649; y por el Parlamento antes de llegar a la ceremonia religiosa de las 11 de la mañana.
Si bien Carlos quiere mostrar que la monarquía sigue siendo relevante en una Gran Bretaña moderna y multicultural, también ha dicho que planea reducir la institución. Se tiene previsto que la coronación refleje eso con una ceremonia más breve y menos extravagante que la de tres horas de Isabel II.
De todas formas, la coronación de Carlos y Camila contará con buena parte del invaluable ajuar de coronación que se ha usado durante siglos, incluidas cinco espadas simbólicas, dos cetros y el Anillo del Soberano, de zafiro con una cruz de rubíes rodeada de diamantes.
Camila, quien portará la corona de la reina María, sostendrá un polémico cetro hecho de marfil. Gran Bretaña prohíbe casi en su totalidad el comercio de productos de marfil de elefante, y el príncipe Guillermo, heredero al trono, ha hecho campaña en contra del tráfico ilícito de partes de animales.
Durante la ceremonia que será conducida por Justin Welby, arzobispo de Canterbury, Carlos será coronado con la corona de San Eduardo, la parte central de la colección de las joyas reales que millones de personas visitan cada año en la Torre de Londres.
Esa corona, que inspiró el emoji de la coronación, cuenta con un marco de oro sólido de 2.2 kilogramos (4.9 libras) incrustado con rubíes, amatistas, zafiros, granates, topacios y turmalinas, y tiene un capuchón de terciopelo morado y una banda de armiño. Isabel la portó durante su coronación y fue adaptada para su hijo.
Al final de la ceremonia, Carlos se colocará la corona Imperial del Estado, más ligera, para la procesión de regreso al palacio.
A diferencia del recorrido de 8 kilómetros (5 millas) que Isabel y su esposo el príncipe Felipe tomaron alrededor de Londres en 1953, Carlos y Camila regresarán por donde vinieron, pero en un carruaje de 260 años de antigüedad que ha sido utilizado en todas las coronaciones desde la de Guillermo IV en 1831, y del que diversos monarcas han dicho que es muy incómodo.