Hijos en la adolescencia

Mantén una sana convivencia

Discusiones, conflictos, vivir con un joven no siempre es sencillo, pero con estos consejos, conseguiréis resolver vuestras diferencias

La convivencia nunca ha sido un asunto sencillo, pero si uno de los miembros que forma parte del núcleo familiar es un adolescente, todavía puede tornarse más complicada.

Hablamos de una etapa repleta de cambios y actitudes. 

Un tránsito entre la infancia y la edad adulta que es temido por muchos padres quienes, la mayoría de las veces, no saben cómo deben actuar ante la rebeldía y disconformidad de sus hijos.

ETAPA

No es una etapa necesariamente problemática por sí misma, si bien es cierto que aparecen diferencias y discrepancias. 

Hemos de tener en cuenta que en esta fase crece su autonomía e independencia, a medida que deben afrontar los nuevos retos que entraña su propio desarrollo y maduración, a nivel biológico y psicológico. 

A esto hay que sumarle otros aspectos tan importantes como las relaciones afectivas y las exigencias de la vida escolar.

RIESGOS

Todo ello hace que sea un momento lleno de oportunidades, pero también de riesgos.

De ahí la importancia de que exista una convivencia confortable en casa, que servirá de protección y, además, puede contribuir a desarrollar todo el potencial que encierra esta etapa.

PANDEMIA

La pandemia ha evidenciado la relevancia de la convivencia, puesto que ha puesto a prueba dicha convivencia y la capacidad de las familias para afrontar y gestionar los cambios que la pandemia ha producido.

PROBLEMAS

Desde las normas de casa hasta la falta de implicación en las tareas: Estos son los problemas más habituales

En general, vivir con un adolescente no significa que la vida diaria esté llena de viscitudes, pero sí puede acarrear ciertos problemas.