Ciudad del Vaticano, 24 jun (EFE).- El papa Francisco ha nombrado nuncio (diplomático vaticano) en Lituania, Estonia y Letonia al arzobispo alemán Georg Gänswein, histórico secretario de Benedicto XVI y que en el pasado fue crítico con el pontífice argentino.
El nombramiento fue confirmado este lunes en un escueto comunicado de la oficina de prensa de la Santa Sede.
Gänswein, de 67 años, fue durante dos décadas secretario del cardenal y después pontífice alemán, quien lo nombró en 2012 prefecto de la Casa Pontificia, uno de los cargos más influyentes de la Curia Romana, y arzobispo de Urbisaglia.
El monseñor fue leal a Ratzinger hasta su muerte el 31 de diciembre de 2022, asistiéndole y acompañándose en el monasterio 'Mater Ecclesiae' del Vaticano, donde el pontífice permaneció desde su histórica renuncia de 2013.
Sin embargo, apenas diez días después del fallecimiento, Gänswein publicó un libro -"Nient'altro che la verità" ("Nada mas que la verdad")- en el que recordaba sus años al servicio de Benedicto XVI y dirigía algunas críticas a su sucesor, Francisco, siempre en el centro de los ataques de las facciones más conservadoras de la Curia Romana.
Entre otras muchas cosas, Gänswein reprochaba a Francisco su caída en desgracia como prefecto de la Casa Pontificia, uno de los puestos más importantes del Vaticano, pues este le encargó cuidar de Ratzinger en su retiro en el monasterio 'Mater Ecclesiae'.
Y aseguraba que el pontífice y teólogo alemán había considerado un error el documento "Traditionis Custodes" con el que Francisco puso coto a las misas en latín, propias de tiempos previos al Concilio Vaticano II, soliviantando a los más tradicionalistas.
Tras su marcha a su Friburgo natal, Gänswein volvió al Vaticano para la misa del primer aniversario de la muerte del papa alemán, en enero de 2023, y pocos días después fue recibido en audiencia privada por Francisco, sin que trascendiera el contenido de la reunión.
Francisco ha opinado sobre las memorias de Gänswein en el libro 'El Sucesor' (2024) del periodista español Javier Martínez-Brocal.
"Me afecta con una gran pena: que el día del sepelio se publique un libro que me pone de vuelta y media, contando cosas que no son verdad, es muy triste. Por supuesto, no me afecta en el sentido de que no me condiciona. Pero sí que me dolió que se usara a Benedicto. El libro salió publicado el día del entierro, eso lo viví como una falta de nobleza y de humanidad", dice Francisco.