Ciudad de México.- La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo presentó ayer y envió al Senado el proyecto de reforma para que a partir de 2026 se implemente de forma gradual la jornada laboral de 40 horas, reduciendo dos horas por año hasta 2030, y beneficiando a 13.4 millones de trabajadores.
En la mañanera, Marath Bolaños, secretario del Trabajo y Previsión Social (STPS), reconoció a las personas trabajadoras que lucharon por esta propuesta y el diálogo con distintos sectores. Sin embargo, aclaró que “no puede ser de un momento a otro”.
Dijo que se trata de “una transformación histórica del mundo del trabajo” y destacó que la semana laboral ajustada trae beneficios no sólo a las y los trabajadores, sino también para las empresas y la economía.
“Para garantizar los derechos de las y los trabajadores, se establecerá a nivel constitucional, así como también en la Ley Federal de Trabajo, una jornada laboral de 40 horas semanales. Esta reducción no podrá implicar reducción de sueldos, ni de salarios ni de prestaciones”, dijo asimismo el secretario de Trabajo.
La propuesta tendrá que ser analizada y aprobada por el Congreso en 2026 y, las modificaciones constitucionales, por los Congresos estatales, explicó.
Francisco Cervantes, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, destacó la importancia del diálogo con el gobierno para negociar condiciones a favor a los trabajadores.
Por su parte, el presidente del Congreso del Trabajo, Reyes Soberanis, dijo que con la jornada laboral de 40 horas se da un paso en la justicia social, pues favorece el desarrollo de los trabajadores y sus familias.