Ciudad de México.- Bajo corrientes políticas opuestas, los dos gigantes de América Latina crecieron a dos ritmos antes y durante la pandemia.
El 1 de enero de 2019, el exmilitar Jair Bolsonaro tomó las riendas de Brasil como el primer presidente de extrema derecha.
La economía brasileña avanzó 1.2% en 2019, cayó 3.9% en 2020, se recuperó 4.6% en 2021 y va a crecer 2.8% en 2022, indican recientes estimaciones del PIB del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Esto significa que la principal economía latinoamericana crecerá a un promedio anual de 1.2% en el mandato de Bolsonaro. Un mes antes de la llegada del líder brasileño, Andrés Manuel López Obrador rindió protesta el 1 de diciembre de 2018, como el primer mandatario en la historia de México perteneciente a una corriente política de izquierda.
El FMI calcula que la economía mexicana cayó 0.2% en 2019, se desplomó 8.1% en 2020, se reactivó 4.8% en 2021 y avanzará 2.1% en 2022, lo que implica una caída promedio de 0.3%.
Es decir, Brasil presenta mejores resultados que México en estos cuatro años, pero además, el primer país se recuperó de la pandemia desde 2021 y el segundo logrará hacerlo hasta 2023. Tras ganar las elecciones, Luiz Inácio Lula da Silva va a asumir como presidente el próximo año. En su anterior mandato, de 2003 a 2010, le arrebató la corona a México como principal economía de América Latina, indica el FMI.