Ciudad de México.- El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador aún debe la mitad de los 815 millones de pesos que prometió para adquirir la marca Mexicana de Aviación así como algunos activos, a causa de una demanda de 45 extrabajadores de la extinta aerolínea.
El año pasado, el gobierno federal, a través de la Secretaría de Infraestructura Comunicaciones y Transportes (SICT), compró por la cantidad mencionada la marca Mexicana de Aviación y otras submarcas, así como un edificio en Guadalajara, un piso en la calle de Balderas en la Ciudad de México, el centro de adiestramiento frente al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y un simulador de vuelo.
El primer pago se hizo en agosto de 2023 por 407 millones de pesos, pero el resto aún no se ha pagado debido a una demanda que interpusieron 45 exempleados de confianza de la compañía.
Los 815 millones de pesos que acordó pagar el gobierno federal se deben distribuir entre 6 mil 500 extrabajadores de Mexicana, representados por el Sindicato Nacional de Trabajadores de Transportes, Transformación, Aviación, Servicios y Similares (SNTTTASS), la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA), la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación de México (ASSA) y la Asociación de Jubilados, Trabajadores y Extrabajadores de la Aviación Mexicana (AJTEAM).
De acuerdo con AJTEAM, los trabajadores de confianza reclamaban el pago de 42 millones de pesos, pero lograron un preconvenio con la SICT para que se les pague menos de ese monto.
La nueva aerolínea del Estado, está lejos de transportar la misma cantidad de pasajeros que Viva Aerobus, Volaris o Aeroméxico.