NUEVA YORK.- El gobierno estadounidense demandó a Visa, acusando a la compañía de servicios financieros de usar su tamaño y dominio del mercado para inhibir la competencia en el mercado de tarjetas de crédito, a un costo de miles de millones de dólares para empresas y particulares.
La querella, presentada el martes por el Departamento de Justicia, alega que Visa penaliza a comercios y bancos que no usan la tecnología de proceso de pagos de Visa para procesar transacciones de tarjetas de débito, a pesar de que existen alternativas. Visa recibe una tarifa incremental con cada transacción procesada en su red.
Según la queja, el 60% de las transacciones de débito en Estados Unidos son a través de la red de Visa, lo que le permite cobrar más de 7.000 millones de dólares cada año en tarifas por procesamiento de cobros.
“Sostenemos que Visa ilegalmente ha acumulado el poder de cobrar tarifas que exceden por mucho lo que podría cobrar en un mercado competitivo”, dijo el secretario de Justicia Merrick B. Garland en un comunicado.
“Los comercios y los bancos le pasan estos costos a los consumidores, ya sea aumentando los precios o reduciendo la calidad del servicio. Como resultado, la conducta ilegal de Visa afecta no solo el precio de una cosa sino el precio de casi todo”.
El gobierno estadounidense últimamente ha apuntado a compañías que, sostiene, actúan como intermediarios – como Live Nation y la compañía de bienes raíces RealPage – acusándolas de imponer tarifas sin sentido y tener una conducta anticompetitiva. También ha presentado cargos de conducta monopólica contra compañías tecnológicas como Apple y Google.
Según la demanda presentada en la corte del distrito sur de Nueva York, Visa usa la enorme cantidad de transacciones en su sistema para exigir compromisos de volumen a comercios y bancos, y así como a instituciones financieras que emiten tarjetas de débito.