Ciudad de México.- Las remesas familiares que llegan a nuestro país, sobre todo de Estados Unidos, se desaceleraron en agosto, pero siguen por arriba de los 5 mil 500 millones de dólares.
El Banco de México (Banxico) informó que en agosto dichos flujos ascendieron a 5 mil 563 millones de dólares, lo que significó un aumento de 8.6% en comparación a igual mes del 2022 cuando sumaron 5 mil 122 millones de dólares con una tasa anual de crecimiento de 7.9%
No obstante, respecto a los dos meses anteriores, es decir, junio y julio, representó un monto menor ya que había México captó remesas por 5 mil 575 y 5 mil 651 millones de dólares, respectivamente.
También bajó de 13.8 millones a 13.7 millones de operaciones de envíos de remesas entre julio y agosto mediante las cuales los paisanos mandaron 403 dólares en promedio frente a los 407 y 409 dólares enviados en los dos meses anteriores.
Así, de enero a agosto del presente año, los ingresos por remesas totalizaron 41 mil 459 millones de dólares, el 9.3% superior a lo que se captó por esa vía en los primeros ocho meses del 2022, según cifras de Banxico.
La desaceleración de los llamados “migradólares” era esperada por los analistas, ya que hace un año sucedió lo mismo por el efecto de base de comparación.
Ola migratoria
Los migrantes que han llegado en la última ola son parte del récord de remesas de México, como muestran las filas de cientos de extranjeros en la frontera sur del país que esperan los dólares que les envían sus compatriotas desde Estados Unidos.
En Tapachula, los migrantes se aglomeran en centros comerciales, tiendas de autoservicio, casas de cambio y bancos en busca de cambiar sus dólares a pesos para pagar su alquiler, alimentos y transporte público.
En medio de las cifras históricas de remesas, México también recibe números sin precedentes de migrantes en las últimas semanas, con 10.000 al día en la frontera con Estados Unidos y 6.000 al día en Chiapas, en el límite con Guatemala, según reconoció el presidente, Andrés Manuel López Obrador, en la mañana.
El empresario local Aníbal Núñez Mejía explicó que los migrantes realizan un fuerte cambio de divisas y últimamente dejan ingresos por sus remesas y la mercancía que cruza de forma ilegal el río Suchiate, que divide a México de Guatemala.
“Van de paso, esta gente está pidiendo dinero para poder trasladarse más adelante”, resaltó.