Ciudad de México.- Desde el 1 de octubre los autos eléctricos importados de países con los que México no tiene tratado de libre comercio deben pagar arancel.
Esta medida afecta a autos eléctricos importados de China, los cuales deberán pagar una tasa arancelaria de entre 15% y 20% para entrar al país, lo que podría presionar los precios al alza a mediano plazo.
Durante los últimos cuatro años los vehículos eléctricos importados de China tuvieron un beneficio de tasa 0% de arancel, para incentivar la llegada de nuevas tecnologías al mercado automotriz mexicano.
Sin embargo, ahora algunos modelos como el BYD Dolphin Mini EV podría pasar de 358 mil 800 pesos a 430 mil 560 pesos, con un arancel de 20%.
Oscar Silva, socio para Norteamérica de la consultora Roland Berger, considera que en el corto plazo todos los fabricantes mantendrán los precios, lo que es positivo para el consumidor.
Sin embargo, a mediano plazo sólo tienen dos opciones: ensamblar en el país o mantener el precio, afectando su ganancia.
“Los fabricantes chinos tendrán que considerar si les conviene ensamblar en el país para evitar ese arancel o mantener el precio”, resaltó.
“La realidad es que la industria automotriz tiene márgenes apretados en general. Los chinos un poco menos, pero esto podría dar origen a un caso de dumping al mantener el precio con un impacto de 15% a 20% de arancel. Pueden surgir dudas sobre dumping o subsidios del gobierno chino”, explicó.
Silva destacó que el mercado mexicano se ha beneficiado de la entrada de autos eléctricos de China, pues en 2020 sólo existía un modelo eléctrico con precio por debajo de 500 mil pesos. Actualmente están disponibles ocho modelos y el del precio de entrada más económico es de 299 mil pesos.