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Sequía provocada SLP, corresponsable

Era mucha la insistencia del Interapas en achacar a Ingenieros Civiles Asociados, o a algunas de sus subsidiarias, la responsabilidad por el desabasto de agua que en la última semana ha afectado a la capital potosina.

“¡Irresponsabilidad de empresas afecta el suministro de agua en #SanLuis!”, así, con signos de admiración, fue el mensaje que el organismo paramunicipal publicó ayer en su cuenta de Twitter.

En un comunicado que contenía algunas inexactitudes, achacaba a las empresas administradoras del acueducto el incumplimiento de varias minutas firmadas con ejidatarios (en realidad, se trataba de pequeños propietarios) guanajuatenses, que, en consecuencia, bloquearon, según su versión una planta potabilizadora (lo que tomaron fue una planta de bombeo).

La versión recabada en Guanajuato, sin embargo, es muy diferente. Los afectados por los daños generados durante la construcción del acueducto llevan años esperando la reparación de los mismos y varias obras complementarios. Los compromisos, dicen, no sólo fueron adquiridos por las empresas de ICA, sino también por las autoridades potosinas.

Ante la falla en concretar las promesas de ambas partes, vino la toma de una de las tres plantas de bombero y las consecuentes acciones de parte de ciudadanos potosinos hartos de la falta de agua que sufrieron por varios días.

Del incumplimiento potosino, se cuidó muy bien de informar Interapas, quizá por la cercanía entre su titular y el encargado de la Comisión Estatal del Agua.

De acuerdo a  los guanajuatenses, el conflicto se destrabó tras la promesa de que el lunes empezaran a concretarse los compromisos pendientes.

Ojo, ni el Interapas ni los pequeños propietarios guanajuatenses consignaron que hubiera representantes de las empresas incumplidas, por lo que si no se concreta la promesa hecha ayer, la responsabilidad será de las autoridades potosinas.

Cualquiera que sea la razón del desabasto, va quedando claro que el tan cacareado sistema de El Realito es claramente insuficiente para garantizar el abasto de agua a la capital, pese a la astronómica suma invertida en él.

El problema debe solucionarse de inmediato, si no se quiere que las protestas persistan. Ojalá que también se opte por una mayor transparencia de las responsabilidades de las autoridades potosinas. El grosero ocultamiento, ya se vio, no funciona.

En la CEGAIP ya empieza a levantar cejas el constante ausentismo de la nueva comisionada María José González Sarzosa, a la que no se le ve por la sede de la comisión más que en los días en que el Pleno sesiona.

Ya empiezan las preguntas si divide su tiempo con otra instancia.

 

¡HASTA MAÑANA!