Elon Musk libera Grok, su revolucionario ambiente de IA

El 11 de marzo, Elon Musk informó a través de X que en menos de una semana liberaría el código abierto de Grok, su ambiente de inteligencia artificial (IA).

Musk cumplió su palabra. Según Forbes, Musk es el segundo hombre más rico del mundo, relegado recientemente a la segunda posición por Bernard Arnault. Grok fue concebido por Musk como un competidor directo de ChatGPT, con su principal ventaja competitiva en su fuente abierta.

Según el Diccionario de Oxford, "grok" es un término de jerga informática que significa entender en profundidad. La palabra evoca la comprensión de ideas complejas de manera intuitiva.

El desarrollo de la IA ha provocado un reordenamiento en las prioridades de las Big Tech. El lanzamiento de Grok mostró el atraso de Alphabet en materia de IA. Google, durante un tiempo, priorizó la mercadotecnia, la publicidad y las ventas sobre la ingeniería, lo que ahora le pasa factura al relegar la innovación y la creatividad.

La nueva apuesta de Google, Google Gema, se enfocó en los desarrolladores, mientras que Gemini, otro ambiente de IA, se diseñó para los usuarios finales. Sin embargo, Google ha cometido errores en la generación de imágenes a través de Gemini y ha sido criticada por fomentar el racismo.

En Meta Platforms, Mark Zuckerberg reconoció el error de priorizar Meta como su metaverso. Tras apoyar a su equipo de expertos en IA, lanzaron LLaMA2, una IA especializada en generar código fuente con 70.000 millones de parámetros.

Grok supera a LLaMA2 con 314.000 millones de parámetros, desafiando directamente a OpenAI. Musk ha denunciado a OpenAI por abandonar su misión original en busca de lucro.

Inicialmente, Grok estará disponible para los miembros de X Premium++. Musk busca incentivar a los usuarios de su sistema de microblogueo y a los interesados en soluciones de IA de código abierto.

Grok es un modelo abierto y gratuito para investigar, aunque con limitaciones para uso comercial que requieren una comisión para usos masivos. La procedencia de los datos utilizados para entrenar el modelo de Grok no ha sido revelada, lo que puede restar credibilidad a los propósitos de Musk en su disputa con OpenAI.