San Francisco abre el “jardín secreto” de Monet

San Francisco abre el  “jardín secreto” de Monet

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San Francisco.- El museo De Young de San Francisco presentó ayer una exhibición sobre Claude Monet en la que los visitantes se adentran en el “jardín secreto” del maestro impresionista francés, unas pinturas de su época más tardía que jamás salieron de su estudio hasta después de que falleciera.

“Monet: The Late Years” (Monet: los últimos años) explora las últimas dos décadas de trabajo del artista, que vivió hasta los 86 años, en las que su estilo fue evolucionando poco a poco del impresionismo hacia la pintura abstracta, sentando así las bases para los movimientos modernistas de principios del siglo XX.

“Estos trabajos muestran cómo, tras sufrir varias experiencias personales devastadoras, Monet, que de joven se había inventado a sí mismo con el impresionismo, fue más allá y se reinventó como precursor del arte abstracto”, explicó durante la presentación el director de los Museos de Bellas Artes de San Francisco (que incluyen el De Young), Thomas Campbell.

Estas experiencias “devastadoras” que marcaron al artista fueron la muerte de su segunda esposa en 1911, la de su hijo mayor en 1914, y el estallido de la Primera Guerra Mundial en 1914; además de verse afligido por cataratas, que le hicieron perder la visión y le impidieron disfrutar de su gran pasión: los colores.





INTERPRETACIÓN

“Como historiadores del arte, tratamos de trazar una línea entre la biografía del artista y la interpretación de la obra, pero en este caso resulta claro que se produjo una influencia sustancial”, apuntó la directora de arte de la institución museística, Melissa Buron.

La exposición empieza con varios cuadros de las series Los Nenúfares y El Puente Japonés, de finales del siglo XIX y principios del XX, unas pinturas con las que la mayoría del público está más familiarizado, pero enseguida pasa a mostrar la evolución de estos mismos temas durante las siguientes décadas.

Así, en los años 10 y 20 del siglo pasado, Monet abandona paulatinamente la representación figurativa, juega con las perspectivas, con los colores y con el contexto, hasta producir pinturas que, si bien mantienen los temas trabajados con anterioridad, constituyen un estilo completamente distinto.