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CIUDAD VALLES.- Primero fue la falta de agua en el nacimiento de Tanchachín lo que averió las bombas de extracción que llevan el agua a la zona tének y después fueron fallas por cuestiones mecánicas las que dejaron sin agua alrededor de dos meses a la cordillera, de acuerdo con el director de Obras Públicas, Alberto Machuca Flores.
Apenas anoche, los habitantes de esta zona tuvieron agua después de 15 días de no contar con el servicio y, luego de una larga temporada de mes y medio que habían estado sin el vital líquido por la poca extracción que se podía hacer debido al bajo nivel del afluente.
El funcionario manifestó que cuando repararon una de las bombas y la colocaron, falló la otra y tuvieron que valerse del préstamo de uno de esos armatostes, para operar, para reparar el propio y que quede listo para dentro de unos tres o cuatro días.
La falta de agua ya había hecho que un colectivo de indígenas contrario al director de Asuntos Indígenas del Ayuntamiento amenazara con tomar la Presidencia para mañana y provocó pleitos a golpes entre mujeres que ganaban turnos en las largas filas que hacían en la madrugada para colectar la poca agua del pozo que surte a ese ejido.
