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Ciudad Valles.- En el homenaje a la bandera de hoy, el director de la escuela Cuauhtémoc, Luis Ramírez Maya pidió al alcalde Adrián Esper que le derrumben un par de aulas de madera que aparte de estar en peligro de colapso, la acción liberaría un área para que los niños por fin gocen de un área verde que la escuela no ha tenido en 70 años de existencia. Inmediatamente después, Eglantina Galván, viuda de Tirso Pozos, supervisora del Sistema Educativo Estatal Regular (SEER) pidió que en vez de eso le agrandaran las oficinas de su adscripción porque ya no cabe el mobiliario ni la gente en ese lugar.
De plano, el alcalde les dijo que les ayudaría con derrumbar las aulas y que quizá con las láminas sobrantes de los arruinados salones harían un techado externo para los padres de familia que van por sus hijos a mediodía, pero que no podía hacer más por todas las peticiones que tiene de otras escuelas.
Jimena Vázquez Torres, presidente de la Sociedad de Padres de Familia dijo que la petición estaba encaminada a liberar el espacio para que los niños tengan un área verde, no para que pidieran agrandar unas oficinas de supervisión para unas cuantas personas.
