Asia recibe el Año Nuevo Lunar
Naciones y comunidades asiáticas celebran la festividad que inicia en la primera luna del calendario lunar
Taipéi, Taiwán.- La gente en Asia dio la bienvenida el sábado al Año Nuevo Lunar con reuniones familiares, festivales y visitas a templos para solicitar bendiciones.
Este es el feriado más importante en China, una fecha para reunirse con familiares y amigos y disfrutar de banquetes festivos. Cada año recibe el nombre de uno de los 12 signos del zodíaco chino, y este es el Año del Dragón, que en las comunidades chinas está considerado como el más favorable.
En China, el Año del Dragón es también muy popular para dar a luz, porque muchas parejas esperan que sus hijos posean las cualidades que simboliza el dragón: fuerza, poder y éxito.
“El dragón personifica el espíritu de autosuperación, el trabajo duro y el empuje de la nación china desde hace 5.000 años. También es un símbolo de la determinación y la aspiración de millones de chinos de tener un país fuerte. El dragón, como emblema de China, es fuerte, valiente y benévolo”, apuntó el presidente de China, Xi Jinping.
Muchos residentes en Hong Kong se vistieron de rojo, el color de la suerte en la cultura china, para celebrar el comienzo del nuevo año. En sus reuniones saborearon pasteles de arroz y nabo, y los niños recibieron sobres rojos con dinero como bendición de sus familiares casados. Las exposiciones al aire libre y las muestras florales reparadas para la ocasión ofrecían a los fiesteros la posibilidad de posar para vistosas fotos.
En Beijing, multitudes acudieron a las ferias de los templos para ver actuaciones folclóricas tradicionales y comprar aperitivos y obras de arte en los distintos puestos. Muchos encendieron varas de incendio para pedir buena salud y la fortuna.
Además de en las sociedades de mayoría china de la región de la Gran China, la fiesta se celebra también en Corea del Sur, Vietnam y en la diáspora china. En Myanmar y Malasia, los fieles visitaron templos para pedir por la buena suerte y bendiciones. En Dharamshala, India, monjes tibetanos exiliados participaron también en las ceremonias para conmemorar el nuevo año.
La quema de petardos y otros fuegos artificiales es una forma tradicional de recibir el nuevo año y liberarse de los malos recuerdos. A los niños se les regalan envoltorios rojos con dinero como muestra de afecto y como una ayuda para los meses siguientes.
Los palacios reales y otros sitios turísticos también estaban repletos de visitantes que vestían las coloridas y tradicionales túnicas “hanbok”. Grupos de refugiados norcoreanos de la guerra civil de 1950-1953, que sigue sin resolverse, hicieron reverencias hacia el norte en los rituales familiares tradicionales que se realizan en la ciudad de Paju, en la frontera sur.
En ciudades con grandes comunidades asiáticas en el extranjero, particularmente en Nueva York y San Francisco, también se realizan desfiles y conmemoraciones.
no te pierdas estas noticias