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El barco “Rainbow Warrior” de Greenpeace navega en los mares de Grecia como parte de una campaña contra la explotación de los yacimientos de gas y petróleo en el oeste del país europeo, y para promover el uso de energía limpia a partir de fuentes renovables.
El buque insignia hizo ya una parada en el Puerto de El Pireo y este viernes se dirige al puerto de Argostoli, en la isla de Cefalonia, para atracar ahí hasta el domingo y seguir su camino al destino final, Corfú, donde permanecerá los días 21 y 22 de junio.
En cada puerto, “Rainbow Warrior” está abierto al público y ofrece una exposición fotográfica sobre las repercusiones del cambio climático, mientras los visitantes pueden proponer soluciones para proteger el clima.
Es una campaña europea de Greenpeace en apoyo a las acciones que llevan a cabo comunidades griegas en protesta por las perforaciones en el mar para extraer hidrocarburos, de acuerdo con la organización ambientalista.
Además, forma parte de los esfuerzos internacionales de Greenpeace contra la crisis climática y la promoción de energía limpia a partir de fuentes renovables en lugar de combustible mineral.
El responsable de Greenpeace en Grecia, Kostas Grimanis, dijo que es hora de que las autoridades escuchen las advertencias sobre las consecuencias del cambio climático y tomen acciones al respecto.
En abril pasado, colectivos ecologistas locales y activistas de Greenpeace protestaron en las instalaciones de la multinacional energética y petroquímica española Repsol cerca de la ciudad de Loannina.
Repsol cuenta con licencias de exploración y explotación de gas y de petróleo en el mar Jónico y en la plataforma continental, en el oeste y noroeste de Grecia.
