Los inconformes colman las calles de Bielorrusia

Moscú, Rusia.- Los bielorrusos salieron por vigésimo domingo a la calle para exigir la renuncia del presidente, Alexandr Lukashenko, y responsabilidades penales por la represión, los casos de tortura y los asesinatos que la oposición y organizaciones de derechos humanos han denunciado en los últimos cuatro meses.

“Es la hora del Tribunal popular”, nombre de la marcha pacífica de este domingo, escribió la líder de la oposición bielorrusa en el exilio, Svetlana Tijanóvskaya, en un tuit.

“Exigimos procedimientos penales por todos los asesinatos, torturas, palizas y represiones. La ley debe ser restaurada”, recalcó la profesora y traductora de inglés convertida en política.

La represión policial se ha saldado con al menos siete muertos, según la oposición, centenares de heridos y más de 10.000 detenidos, muchos de ellos sometidos a maltratos y torturas en los centros de detención, según el testimonio de las propias víctimas y documentación recogida por ONG como Human Rights Watch.

La marcha de este domingo, como siempre con banderas rojiblancas, símbolo de la oposición, se ha producido en diferentes barrios de la capital bielorrusa y otras ciudades, como Grodno, Brest o Vítebsk, conforme a la nueva táctica ciudadana ideada para evitar detenciones.

La estrategia para eludir la represión policial, sin embargo, no surte efecto, dado que las fuerzas de seguridad del régimen de Lukashenko también se han adaptado a los cambios y ahora son desplegados por barrios para practicar arrestos.

De acuerdo con el departamento de la Policía de la ciudad de Minsk, los agentes policiacos detuvieron unas cien personas por participar en acciones de protesta no autorizadas.

La oposición está documentando la identidad de aquellos agentes que participan en la represión del régimen de Lukashenko, en el poder desde hace 26 años, a fin de tratar de juzgarlos en un futuro.

Por otro lado, Olga Jizhinkova, Miss Bielorrusia de 2008 y exportavoz del club de fútbol Dinamo Brest, salió este domingo en libertad tras 42 días en prisión por haber participado en las protestas ciudadanas que llevan semanas en ese país.