Reunión entre Pedro Sánchez y Xi Jinping en China

BEIJING (AP) — El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, abordó los conflictos de Ucrania y Gaza y la necesidad de unas “relaciones estrechas, profundas y equilibradas” entre España y China durante una reunión con el líder chino Xi Jinping, según informó el gobierno español.

El segundo viaje de Sánchez a China en menos de dos años “pone de manifiesto la voluntad compartida por ambos países de mantener un diálogo regular al más alto nivel en sus relaciones bilaterales”, según el comunicado del gobierno.

En las conversaciones que Sánchez y Xi mantuvieron el lunes en la Casa Estatal de Huéspedes Diaoyutai de Beijing se abordaron los conflictos de Ucrania y Gaza, y el líder español insistió en trabajar por la paz con la participación de Naciones Unidas. China es uno de los cinco miembros permanentes con derecho a veto del Consejo de Seguridad de la ONU.

España es miembro de la OTAN, a la que China ha acusado de incitar al presidente ruso Vladímir Putin a lanzar su invasión a gran escala de Ucrania hace más de dos años.

Sánchez, que también se reunió con el primer ministro chino Li Qiang, dijo: “Queremos tender puentes para defender conjuntamente un orden comercial justo que permita el crecimiento de nuestras economías y beneficie a nuestras industrias y ciudadanos”, según el comunicado del gobierno.

Sánchez y los funcionarios chinos hicieron declaraciones a favor del libre comercio y la promoción de los intercambios culturales y el turismo, según la cadena estatal china CCTV, pero no anunciaron ningún acuerdo concreto en una disputa en curso sobre los vehículos eléctricos.

“Esperamos que España siga proporcionando un entorno empresarial justo, equitativo, seguro y no discriminatorio para que las empresas chinas inviertan y hagan negocios”, dijo Xi, de acuerdo con la CCTV.

Por su parte, Sánchez afirmó que “España apoya los principios de libre comercio y mercados abiertos y no apoya una guerra comercial”, según la CCTV.

El comercio es uno de los temas más espinosos entre China y España. España estuvo entre los miembros de la UE que expresaron su apoyo este año a un arancel del 36,7% sobre los vehículos eléctricos chinos.