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Víctimas del genocidio ruandés muestran su preocupación por la ausencia de juicio a Kabuga

Por EFE

Agosto 11, 2023 12:43 p.m.

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Fotografías de víctimas del genocidio en Ruanda / Foto: AP

Fotografías de víctimas del genocidio en Ruanda / Foto: AP

KIGALI (EFE).- Ibuka, una organización paraguas de las asociaciones de supervivientes del genocidio que sacudió a Ruanda en 1994, manifestó hoy su "profunda preocupación" por la decisión del tribunal de Naciones Unidas de no celebrar un juicio al empresario Félicien Kabuga, acusado por su papel en la matanza, debido a su estado físico.

En un comunicado, la organización dijo este viernes que con este dictamen se ha "ignorado deliberadamente a las víctimas y supervivientes de los crímenes de los que se acusa a Kabuga, que han esperado mucho tiempo para que se haga justicia".

"La condición de Kabuga para ser juzgado es una mera excusa y un ejemplo de doble moral para no mencionar una discriminación manifiesta en detrimento tanto de las víctimas como de los supervivientes", agregó.

Además, para Ibuka, la decisión de suspender las acciones penales contra Kabuga por los motivos expuestos sentaría un precedente que daría lugar a otras decisiones similares en beneficio de los prófugos y sospechosos de genocidio en libertad.

El Mecanismo Residual Internacional de los Tribunales Penales (IRMCT), que se hace cargo de los casos pendientes que dejó el Tribunal Penal Internacional para Ruanda tras su clausura en 2015, dictaminó el pasado junio que Kabuga "no está en condiciones" de ser juzgado por los crímenes de los que se le acusa y que "es muy poco probable que recupere su estado físico en el futuro".

Por ese motivo, el IRMCT, que tomó esa decisión a raíz de informes médicos tras interrumpir el juicio en marzo para evaluar el estado de salud de Kabuga, propuso llevar a cabo un procedimiento legal alternativo lo más parecido posible, pero sin posibilidad de condena final.

A Kabuga se le atribuye un papel vital en la financiación del genocidio, al haber brindado apoyo material, logístico, financiero y armamentístico a grupos hutus, además de fundar y dirigir la "Radio Télévision Libre des Mille collines" (RTLM), emisora que fomentó el odio y la violencia contra los tutsis.

El genocidio empezó el 7 de abril de 1994 tras el asesinato el día anterior de los presidentes de Ruanda, Juvénal Habyarimana (hutu), y Burundi, Cyprien Ntaryamira (hutu), cuando el avión en el que viajaban fue derribado sobre Kigali.

La matanza que siguió -el Gobierno ruandés acusó del magnicidio a los rebeldes tutsis del Frente Patriótico Ruandés (RPF, en inglés), contra los que libraba una guerra desde 1990- causó la muerte de al menos 800,000 tutsis y hutus moderados en poco más de tres meses.

Fue una de las peores matanzas étnicas de la historia reciente de la humanidad.