Fiscal regresa a Morelos
Uriel Carmona salió ayer del penal de El Altiplano
Cuernavaca, Morelos.- De la casa del fiscal Uriel Carmona, ubicada en el barrio de Amatitán, en el corazón de Cuernavaca, penden dos banderas.
Una con los colores del arcoíris y otra con celeste, rosa y blanco, que simbolizan a las comunidades LGBT+ y Transgénero.
Las enseñas fueron colocadas por Alida Martínez, mujer trans, coordinadora de la Casa de las Muñecas, única organización civil que, junto con un grupo de reporteros, esperaban la llegada del titular de la Fiscalía General del Estado tras su salida del penal de alta seguridad de El Altiplano.
Sobre la calle Copalhuacan también estacionaron sus camionetas elementos de la Fiscalía de Investigación en Delitos de Alto Impacto (FIDAI) para dar la bienvenida a su jefe y resguardar su domicilio. Eran los mismos elementos que la noche del jueves encararon al vicefiscal anticorrupción Édgar Núñez Urquiza y trataron de detenerlo por la toma del edificio con el apoyo de la Marina y la Policía Morelos.
Algunos reporteros estimaron el arribo del convoy del fiscal hacia las 13:00 horas del viernes; sin embargo, hacia las 16:00 horas no había llegado nadie.
El fiscal debe su permanencia al Congreso del estado porque nunca cedieron a la presión de removerlo y, por el contrario, modificaron la Constitución para establecer que un fiscal en proceso sería removido del cargo hasta que sea sentenciado.
Al conocer la liberación del fiscal, la senadora de Morena Lucía Meza criticó la defensa férrea que los tribunales federales ejercieron a favor del funcionario estatal, pese a las evidencias en su contra.
“Con la liberación del fiscal del estado, los tribunales federales les dieron la espalda a las víctimas de los delitos no esclarecidos, pero, sobre todo, dieron un duro golpe a la esperanza de justicia de las familias de todas las mujeres que han sido asesinadas en Morelos”, dijo la legisladora.