Campañas y promesas
“Se puede ganar con la mitad de un país, pero no se puede gobernar con la otra mitad en contra”. John F. Kennedy
Estamos en pleno proceso electoral. Las campañas por la Presidencia de México y federales iniciaron hace poco más de un mes. Las locales, el pasado 20 de abril.
Temporada de abrazos, promesas y compromisos que permite echar una mirada al pasado para recordar que prometieron, que resultó al final del gobierno de los últimos 5 presidentes del país, y comprender por qué llegamos al punto donde hoy estamos:
CARLOS SALINAS DE GORTARI (1988-1994)
• Lemas: “Gobernaré para todos”, y “Que hable México”
• Resultado: Incrementó el gasto fiscal a niveles históricos provocando una profunda crisis económica y devaluación en diciembre de 1994, marcando el inicio del sexenio de su sucesor; privatizó TELMEX y muchas empresas del Estado, beneficiando a una pequeña élite empresarial y política; se creó el programa clientelar de SOLIDARIDAD, y la Secretaría donde se manejaba: SEDESOL.
ERNESTO ZEDILLO PONCE DE LEÓN (1994-2000)
• Lema: “Bienestar para tu familia”
• Resultado: Su gobierno estuvo marcado por la crisis financiera y económica de diciembre de 1994, el rescate a la banca y creación del FOBAPROA, y la matanza en Acteal, Chiapas; el gasto en educación, salud y subsidios alimentarios decrecieron al menos de 6%, 7% y 10%, respectivamente, para ser canalizado, en su mayor parte, al programa PROGRESA, nombre que sustituyó al programa salinista SOLIDARIDAD; en algún momento de su sexenio, la pobreza llegó al 70% de la población, el bienestar solo llegó a unas cuantas familias.
VICENTE FOX QUESADA (2000-2006)
• Lema: “El gobierno del cambio”
• Resultado: Su triunfo resultó en una transición política histórica fruto del hartazgo por los malos resultados económicos, nulo bienestar social y desgaste político registrado en los últimos 4 sexenios; se sucedieron un sinnúmero de escándalos familiares por presunta corrupción; prometió arreglar en 15 minutos el conflicto con el EZLN en Chiapas; el “cambio” nunca llegó. En menos de tres años la sociedad se desencantó por sus actitudes triviales, comprometió su discurso con las clases hegemónicas y perdió de vista el momento histórico que representó.
FELIPE CALDERÓN HINOJOSA (2006-2012)
• Lemas: “Valor y pasión por México” y “Para que vivamos mejor”
• Resultado: Al inicio de su gobierno había poco más de 1.8 millones de desempleados, al final esta cifra creció a 2.4 millones; la pobreza repuntó; se disparó la violencia e inseguridad a raíz del inicio de la llamada “guerra contra el narco”; trató durante toda su gestión legitimar su llegada al poder.
ENRIQUE PEÑA NIETO (2012-2018)
• Lemas: “Te lo firmo y te lo cumplo”; y “Mi compromiso es contigo”
• Resultado: firmó ante notario público 266 compromisos relativos a recuperar la paz, eliminar la pobreza, mejorar la educación, impulsar el crecimiento económico y llevar al país al liderazgo internacional; firmó el Pacto por México, acuerdo que trajo varias reformas estructurales que fueron el centro de operación de su gobierno; su gestión estuvo marcada por innumerables hechos de corrupción.
ANDRéS MANUEL LÓPEZ OBRADOR (2018-2024)
• Lema: “Por el bien de todos, primero los pobres”
• Resultado: Obras de infraestructura controvertidas; respeto a la autonomía del Banco de México; incremento del salario mínimo; postura cuestionada en el combate a la corrupción; violencia de todo tipo en aumento, y un poder militar que parece estar por encima de las esferas civiles en varios rubros.
Xóchitl Gálvez de la coalición “Fuerza y Corazón por México” (PRI-PAN-PRD), su lema “Por un México sin miedo”; de la coalición “Sigamos Haciendo Historia” (Morena-PT y PVEM) Claudia Sheinbaum candidata oficial y de la continuidad del proyecto de AMLO, busca priorizar la atención a los sectores vulnerables; y Jorge Álvarez Máynez con su lema “Lo nuevo, va en serio”, pretende darse a conocer.
Un lema, eslogan -o jingle- electoral es un mensaje directo que intenta captar la atención y permanecer en nuestro cerebro para transmitir en una frase corta la ideología que hay detrás de un partido político.
Al hacer este repaso, estará de acuerdo conmigo que en los últimos 36 años nuestro país no fue gobernado para todos, ni tenemos más bienestar en nuestras familias, tampoco cambió a mejor el gobierno, ni vivimos mejor, ni se comprometieron con nosotros, y mucho menos han estado en primer lugar los pobres. Somos una sociedad enojada, polarizada, dividida e intolerante porque en el fondo sentimos que mucho de lo prometido se incumplió. Resultó más fácil destruir, que construir.
La radicalización en el discurso de los candidatos, y después presidentes, únicamente sirvió para dividir el país… “estás conmigo, o contra mí”. Las promesas y compromisos se construyen con argumentos en lugar de identidades. Tuvimos promesas con argumentos flojos, pero eso sí, con demasiada identidad.
Hace falta un diálogo constructivo que parta de una educación para empoderar al ciudadano; es decir, formar para tener conocimiento y comprensión de lo que sucede para tener las mejores herramientas y decidir desterrando la política clientelar.
Evitemos renunciar a la política para impedir perpetuar la política existente. No se usted, pero a mí ya no me gusta lo que veo. Usemos el poder del diálogo, la razón y la voluntad para, con nuestro voto, aprovechar la oportunidad histórica de elegir lo mejor para nosotros y las generaciones por venir.
jmanuelrm@msn.com
