Corte independiente

El recién casado llegó a su departamento y encontró a su flamante mujercita en estrecho abrazo de pasional amor con un individuo de estatura procerosa, rubio y fornido, que vestía ropas clericales. Mudo el cuclillo al ver aquello le dijo su esposa: “Antes de casarnos te informé que tenía un pastor alemán, y tú me dijiste que no había problema, que podía traerlo al departamento”... Una amiga le preguntó a la mujer de don Languidio: “¿Qué te gusta más: la Navidad o hacer el amor?”. Sin vacilar respondió ella: “La Navidad”. “¿Por qué?” -quiso saber la amiga. Explicó la señora: “Es más seguido”... La casa iba a ser fumigada, de modo que el señor y la señora hubieron de pasar la noche en un hotel. En la recepción el encargado le indicó al señor: “Debe usted registrarse”. Inquirió el señor: “¿Mi esposa también?”. “No -replicó el empleado-. Ella es clienta de años”... Una mujer joven llegó a la farmacia y le pidió a la dependienta: “Dame por favor una caja de toallas sanitarias”. Seguidamente alzó la vista al cielo y exclamó con fervoroso acento: “¡Gracias, Diosito!”... En la barra de la cantina, ante su copa, declaró el astroso ebrio: “Alguna vez fui rico”. Preguntó el cantinero: “¿Cuándo?”. Suspiró el beodo: “Hace dos divorcios”... Un tipo le contó a otro: “Mi madre trajo al mundo 14 hijos. La tenemos en un pedestal. Ahora espera el hijo número 15. Papá la bajó del pedestal”... Aplaudo -con las dos manos, para mayor efecto- a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Se abstuvieron de asistir a la astracanada a la que convocó en Tijuana López Obrador, y al hacerlo evidenciaron no sólo autonomía frente al Poder Ejecutivo, sino también respeto a su investidura. En agonía los partidos de oposición; enceguecido el pueblo; hostigados los organismos de la sociedad civil; obsecuentes casi todas las cúpulas del sector privado, o en un silencio que a la postre puede resultar suicida, el único contrapeso que tiene el poder omnímodo de López Obrador es la prensa independiente, en forma principal el Grupo Reforma, y la Suprema Corte. Ésta sufrió el acoso de AMLO con esa intentona de aumentar el número de ministros a fin de colocar en el máximo órgano a incondicionales suyos en número tal que le permita tomar el control del Poder Judicial. La actitud de los ministros de la Corte es entonces merecedora de reconocimiento. Constituye una valiosa declaración de independencia sumamente importante en este tiempo en que el Presidente que juró cumplir la Constitución y las leyes que de ella emanen impone su voluntad por sobre ellas... El famoso explorador inglés sir Fluffyrump y su esposa iban por la helada soledad del Himalaya cuando les salió al paso el Yeti, a quien sus malquerientes llaman el Abominable Hombre de las Nieves. El monstruo tomó en sus membrudos brazos a la señora y se alejó con ella. Sir Fluffyrump le gritó a su mujer: “¡Dile que te duele la cabeza!”... Astatrasio Garrajarra, el borrachín del pueblo, llegó a su casa, como de costumbre, a horas de la madrugada. En la oscuridad de la alcoba se desvistió y se metió en la cama. Lo sintió su esposa y le preguntó. “¿Eres tú, Astatrasio?”. Respondió el temulento: “Si no soy yo vas a ver la que se va a armar”... Don Senilio, señor octogenario, fue a confesarse con el padre Arsilio. Le dijo: “Acúsome, padre, de que anoche estuve con una linda chica de 20 años, y le hice el amor tres veces”. “Grave pecado es ése -lo amonestó el buen sacerdote-, siendo tú casado. De penitencia rezarás tres rosarios, uno por cada vez”. Exclamó lleno de alegría don Senilio: “¿Entonces usted sí me cree, padrecito?”. FIN.