Siempre he dicho que si los bancos extranjeros cobraran en sus países la mitad de las comisiones que nos cobran aquí, les apedrearían sus sucursales. Pero me quedé corto. A ver, calcule usted cuántos tipos de comisiones nos cobran. Échele. Pero mucho. ¿Cincuenta, cien, doscientas, quinientas?…no…son cinco mil 300 comisiones diferentes. Por todo tipo de movimientos y operaciones que usted y yo hacemos en los bancos: el robo del siglo.
Si no me creen, métanse al libro de Ricardo Monreal: “Reforma al Sistema Financiero Mexicano. Una visión de futuro”, que además de un análisis puntual y estadístico, es una larga y documentada denuncia de la brutal injusticia que padecemos los mexicanos cada día. Que a la mejor por rutinaria es menos perceptible, pero terriblemente perjudicial para nuestros bolsillos, el bienestar de nuestras familias y –sin exageración alguna- el desarrollo de México. “Donde hace tiempo que no podemos lograr un crecimiento al ritmo esperado. Vivimos en una situación de permanente incapacidad, para generar empleos estables y dignos, y contar con productos financieros buenos y accesibles; incapacidad para tener un mercado interno fuerte que permita a las personas vivir libres y en paz. Y es que en términos de renta y capital, hay un acaparamiento mayúsculo por parte de un grupo de privilegiados que se han visto favorecidos debido a su excesiva influencia sobre las políticas públicas del país”. Así de contundente es Monreal en su libro.
Por cierto, hace un par de años provocó una escandalera con alguna iniciativa similar y por poco lo queman en leña verde. Pero eran otros tiempos y otro su posicionamiento como legislador de oposición. Ahora es Presidente de la Jucopo del Senado de la República y líder de la bancada de Morena, el partido dominante. Lo que le da un mayor peso específico a señalamientos y conclusiones inquietantes que se desprenden de su trabajo:
-En la banca relativamente “mexicana” son los intereses extranjeros los que deciden.
-México es la presa ideal para la voracidad de los bancos: se financian barato y prestan caro.
-Las mayores ganancias de los bancos extranjeros las obtienen de los mexicanos. BBVA Bancomer alcanzó aquí el 40 % de sus utilidades en todo el mundo.
-Las ganancias de Citi-Banamex salvaron de la quiebra a Citigroup en la crisis del 2009.
-El pago a la banca por el Fobaproa es demencial: el “rescate bancario” original, por 168 mil millones de pesos, se convirtió en deuda pública y se incrementó exponencialmente; entre todos nosotros hemos pagado 859 mil millones de pesos solo de intereses; todavía debemos 467 mil millones y el acumulado es de 1 millón de millones 626 mil millones a pagar en cómodos 70 años.
Dice Ricardo Monreal en su libro que “El Sistema Financiero Mexicano requiere cambios que lo inserten en la nueva dinámica mundial y detonen en una verdadera inclusión financiera para ampliar y profundizar el acceso al crédito, impulsar el crecimiento económico, reducir la pobreza y aminorar la desigualdad”.
Ya en entrevista, me adelanta que él, Morena y está seguro que el propio Presiente López Obrador van a convencer a los banqueros de que tanto abuso no le conviene a nadie, sobre todo en el mediano y largo plazo. Y que esta reforma financiera es impostergable. A ver si es cierto.
PD. ¿Y el café, Sr. Presidente?
Creo que hace falta ahora más que nunca.