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Monterrey, Nuevo León, en plena sequía

Por Adolfo González Díaz Infante

Julio 02, 2022 03:00 a.m.

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A principios de abril de este mismo año escribimos en esta columna sobre la escasez de agua en Monterrey y la inminente sequía que se acercaba. Pues al día de hoy estamos en plena sequía y toda la ciudad se encuentra en un racionamiento de disposición del agua. Están esperando la conclusión de perforación y equipamiento de nuevos pozos profundos, donde se habla de más de 1,000 metros de profundidad, con el consecuente costo de excavación, y el ENORME COSTO de operación especialmente la energía necesaria para elevar esa columna de agua hasta su uso final. También se está esperando la TEMPORADA DE HURACANES que conlleva la temporada de lluvias. Ambas son soluciones a corto plazo, por la emergencia. Y se habla de construcción de nuevas presas, lo cual será una solución a mediano plazo es decir faltan años para terminarlas.

Pero éstas son soluciones inmediatas para cubrir la demanda de la población y de la industria, que son los que sienten en su propia vida diaria dicha escasez o falta del agua. Mas no ataca el problema en sus orígenes primordiales ECOLÓGICOS. Simplemente imaginemos tener toda la INFRESTRUCTURA HIDRÁULICA necesaria para el funcionamiento perfecto de la ciudad, pero NO LLUEVE Y NO TENEMOS SUFICIENTE AGUA, como está sucediendo hoy, en que se combina la falta de agua con la falta de infraestructura. Simplemente el resultado es el mismo: no tenemos agua al final del camino. Nos estamos quedando en la superficie del problema y no estamos en lo profundo del mismo.

Recordemos que en este caso estamos hablando de 5 millones de habitantes afectados, además del 8 % del PIB del país, y por lo tanto de ese tamaño puede ser el costo económico de esta sequía si no se termina.

El origen de la sequía nuevamente es ECOLÓGICO y en él influyen en primerísimos lugares la DEFORESTACIÓN de nuestros bosques por medio de la TALA INMODERADA de los mismos y la TEMPORADA DE INCENDIOS, que en esa zona del país es realmente exagerada, siempre en los meses de febrero y marzo se incendian los mismos bosques en los municipios de la Sierra Madre, que son los que drenan gran parte del agua que llega a las presas de Monterrey. Se calcula que entre el 20% y el 40 % de la lluvia se genera por la propia transpiración de los árboles, ya existen estudios muy concretos a este respecto.

EL CAMBIO CLIMÁTICO, que se manifiesta en el aumento de las temperaturas planetarias, también influye en esta escasez de agua en Monterrey, que es de los principales contribuyentes a dicho problema en México, ya que es de las zonas industriales más grandes del país y por lo tanto de las que generan más liberación de gases de efecto invernadero.

En el resto del país debemos de tener como experiencia y ejemplo de lo que pasará próximamente en las ciudades medias del país si crecen de la misma manera que el área metropolitana de Monterrey.

Nuevamente debemos de entender que esa parte de los orígenes del problema es nuestra, ya que contribuimos con nuestra vida diaria con QUEMA DE GASOLINA, DESPERDICIO DE AGUA, UTILIZACIÓN EXCESIVA DE PAPEL, Y EN GENERAL NUESTRO COMPORTAMIENTO CONSUMISTA.

En el caso de Monterrey les está tocando pagar apenas las primeras facturas del abuso ecológico que hacemos todos. Es muy fácil echar la culpa a los gobiernos -que también tienen su parte de culpa por la falta de prevención del problema, mas el propio gobierno en su miopía ecológica no aprende de la historia y debe saber que esta sequía le puede costar su propia permanencia en el mismo gobierno. Hoy el gobernador hasta nos da informes de meteorología y si no llueve esta sequía le podría costar su mandato en ese estado.

Ejemplos sobran en la historia de la humanidad de costo político por motivos ecológicos. Aquí en nuestro país tenemos un ejemplo en LA CULTURA MAYA del sureste de México. Una de las teorías de la desaparición de la civilización maya es por el abuso y la deforestación de la península de Yucatán para tener la suficiente cal para ser utilizada en la edificación de sus ciudades, lo cual alteró los patrones de lluvia y generó sequías prolongadas que al final provocaron el FIN DE SU CIVILIZACIÓN. En este caso podría generar el cambio de gobierno POR PRESIONES DE LA PROPIA SOCIEDAD, que es en gran parte la culpable de la situación. Nuevamente el equilibrio cósmico nos coloca en esta posición.