Doble drama: estar enfermo y en prisión

Con corte al 6 de febrero, el 18.63 por ciento de la población privada de la libertad en los Centros Estatales de Reinserción Social (Cereso) de San Luis Potosí, padecía alguna patología o tenía alguna discapacidad.

En respuesta a la solicitud de información con folio 242840524000018 presentada por un particular, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) estatal, expuso que hasta esa fecha estaban en prisión 3 mil 107 personas. 

Sobre afectaciones de la vista, desglosa siete personas privadas de la libertad (PPL) con patologías visuales; 233 con ametropías, hipermetropías - y miopías muy altas; cinco con ausencia de uno o ambos ojos y dos con ceguera y ayuda de bastón blanco.

Respecto a problemas de movilidad, 19 padecían males crónicos degenerativos; ocho con amputaciones de miembros superiores o inferiores; dos usaban muletas; dos tenían enfermedad articular; dos distrofia muscular; tres utilizaban prótesis; uno estaba en silla de ruedas y uno con cualquier tipo de invalidez.

A su vez, por patologías: 116 padecía males no controlados-descompensados; 11 con virus de inmunodeficiencia humana (VIH); 109 con diabetes mellitus tipo I y II; 46 adultos mayores (enfermedades crónico-degenerativas) y dos con tuberculosis.

Además ocho padecían del oído, cinco con una dificultad auditiva y tres con ayuda auditiva con aparatos. Del habla, uno tenía dificultad para hablar y de la cabeza, uno padecía traumatismo craneoencefálico.

Aparte, Jaime Arturo Gutiérrez Barrios, titular de Dirección General de Prevención y Reinserción Social de la SSPC, informó que del Cereso ubicado en la delegación La Pila, alrededor de nueve internos acuden continuamente al Hospital Central "Ignacio Morones Prieto" para recibir diálisis o hemodiálisis.