Ilegibles, mamparas turísticas
Grafiteros y vándalos se han dedicado a dañarlas por años; no hay quien las repare
En el jardín Cristóbal Colón y puntos diversos de la Calzada de Guadalupe, las mamparas de señalética turística ya resultan ilegibles por los daños que en ellas han causado los grafiteros y vándalos del rumbo, sin que a la fecha exista un plan para su retiro o reposición.
Un caso se encuentra en el cuadrante noreste del jardín, señalética que explica algo del origen del sitio, del antecedente del templo y convento de La Merced y del porqué del nombre impuesto al área verde.
La explicación está disponible tanto en español como en inglés e incluso en sistema Braille para personas con discapacidad visual, pero gran parte del contenido ya no se puede leer a causa de los daños ocasionados por el grafiti y el vandalismo.
Otro elemento de señalética, igual de dañado, se ubica al inicio de la Calzada de Guadalupe, a partir del cruce con la calle de Miguel Barragán, y en él se explica el origen del largo paseo adoquinado. Esta mampara sí es más legible, pero igual ofrece un aspecto desagradable.
Como estos dos ejemplos hay muchos en el Centro Histórico de la capital: mamparas con información turística instaladas hace ya varias décadas y a las cuales, a la fecha, ni el gobierno municipal ni el estatal o federal les han dado mantenimiento ni han pensado en su renovación con elementos más modernos.
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