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No es frecuente que llegue carne contaminada con clembuterol al Rastro Municipal, pero sí es una realidad y sí está sucediendo, y es una causa en la que los señalados son quienes engordan el ganado o a veces los propios introductores, aseguró el director general de Servicios Municipales de la alcaldía capitalina, Gonzalo Benavente González.
Dijo que en cada caso detectado, es decir, en el filtro que representa el Rastro Municipal, los ganaderos saben que les decomisan la carne para incinerarla y posteriormente enviarla al relleno sanitario.
Comentó no saber qué ocurra en los casos donde la carne no pasa por el rastro, pero cuando la autoridad detecta el producto, de inmediato es destruido, con las consecuentes pérdidas para los ganaderos.
Señaló que cuando se hace la detección de carne contaminada, la alcaldía da aviso a la Secretaría de Salud para que revise el producto y posteriormente se le destruye, para evitar que circule, con la consecuente pérdida que representa para el introductor o para el ganadero.
Precisó que es necesario utilizar petróleo o diesel para destruir la carne, para que posteriormente sea enviada en condiciones seguras al relleno sanitario de San Juanico.
