Este Jueves Santo, en el que se conmemora la tradicional visita de los Siete Altares, los templos permanecieron cerrados debido a la contingencia por el coronavirus. Ante ello, algunos feligreses acudieron a rezar oraciones afuera de los recintos católicos.
Las principales iglesias del Centro Histórico capitalino lucieron con puertas cerradas, pero con una imagen de cartulina referente a la conmemoración.
El recorrido fue llevado a cabo por algunos devotos de forma individual, quienes se apostaron en la entrada para orar, extender sus brazos y levantar la mirada al cielo.
En el Sagrado Corazón el párroco encargado colocó un aviso, donde notificó a los creyentes la suspensión de actividades de Semana Santa, derivado de la contingencia sanitaria.
Aun con la notificación, se observó a personas que arribaron con su libro de oración, se tomaron varios minutos y rezaron.