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Catalina Enríquez Arévalo recibió el primer sacramento de la Iglesia, en una sobria ceremonia.
Con sus papás, Rodrigo Enríquez y Paola Arévalo, participaron de la celebración religiosa, en la parroquia San Agustín del Pedregal.
Estuvieron, seres queridos y amistades cercanas, quienes compartieron este día especial.
Invitaron de padrinos a, Mauricio y Paola Arévalo; se comprometieron ante la Iglesia, a que su ahijada lleve con alegría a Cristo, en su corazón.
El sacerdote Salvador González Vásquez, exhortó a los papás de la pequeña, a que su vida sea plena de amor y respeto a Dios y que sean ejemplo de fortaleza.
Enseguida, el presbítero derramó sobre las sienes de la pequeña, el agua bendita del Río Jordán, para así bautizarla.
Al final, recibió prolongados aplausos de la concurrencia, quienes les desearon prosperidad y felicidad.
