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Flores a los muertos

Por Redacción

Noviembre 02, 2020 03:00 a.m.

En los funerales prevalecen las flores, en ramos, arreglos, coronas o capullos individuales, dentro del ataúd o fuera. 

Las flores y pétalos han simbolizado siempre la vida de la persona fallecida.

La evidencia sugiere que el hombre primitivo no se limitó a descartar 

a los muertos, en lugar de ello, las observaciones de prácticas rituales sugieren una religión rudimentaria. Los arqueólogos descubrieron restos humanos, en la cueva Shanidar de Irak, que se remontan al hombre de Neandertal hace unos 45.000 a 60.000 años.

Atados en una posición fetal; los cuerpos fueron acompañados originalmente con restos de comida, ocre y e incluso pétalos de flores.

COSTUMBRE

La mayoría de todas las sociedades o religiones conocidas desde los neandertales han adoptado el uso de flores y pétalos en las costumbres de muerte.

Ya sea como una ofrenda a los muertos, a los espíritus que se cree que habitan en la otra vida, o como un elemento simbólico.Antiguas culturas paganas desde Babilonia a Egipto, Polinesia y la India decoraban tumbas, cuerpos o sepulcros con flores, sueltas o en ramos.

Los primeros cristianos, como los griegos y los romanos, lejos de rehuir de las tradiciones de los paganos, las adaptaron, esparciendo flores sobre las tumbas funerarias de luto.

CICLO DE VIDA

Tal vez refleje el eterno amor del hombre por la belleza que las flores sean elegidas como tributo y ofrenda a los muertos, o tal vez el ciclo  natural de la vida de una flor simbolice hábilmente el ciclo de vida del hombre, del nacimiento a la muerte.

Hoy, rastros de las creencias primitivas en la magia espiritual se muestran en México en el “Día de los Muertos”, cuando los ancestros  fallecidos son honrados y pétalos de flores son arrojados en las calles para formar un camino para los espíritus que vagan.

ANTIGÜEDAD

Todo parece indicar que el origen de dicha costumbre se remonta a la antigüedad, en la que los muertos eran puestos a exposición  de todos durante varios días, con el propósito de ser velados y pedir por sus almas.

VELACIÓN

Por aquel entonces no existían las avanzadas técnicas de embalsamiento y las que habían no estaban al alcance de todo el mundo, 

por lo que, los cuerpos, que solían estar expuestos a la intemperie, se descomponían y desprendían un desagradable olor, sobre todo en época de calor.Para enmascarar ese hedor, se quemaba incienso y se cubría al fallecido con todo tipo de flores, lo cual aromatizaba el ambiente y hacía más agradable el acto de velar al difunto.

Con el transcurrir de los años, la costumbre de llevar flores a los muertos perduró y se afianzó, no solo durante el tiempo de vela y entierro, sino que también en días específicos, como ayer, Día Todos los Santos y, hoy, Día de Muertos.