Peatones que diariamente se ven obligados a tomar transportes o a caminar a sus centros de trabajo o escuelas por bulevar Rocha Cordero, la glorieta, la salida a Guadalajara y Cordillera de los Alpes, se arriesgan todos los días porque no hay aceras y deben transitar a la vera de la carpeta asfáltica o por espacios de terracería.
En la zona se encuentran fraccionamientos residenciales de alto precio como Lomas del Tecnológico, Miravalle, Sierra Azul, Villa Antigua y Lomas cuarta sección; ninguno de esos desarrollos generó infraestructura para los peatones sobre bulevar Rocha Cordero. Los desarrollos cerrados del Pedregal, en cambio, sí procuraron aceras al otro lado de sus muros perimetrales que colindan con el bulevar.
Estudiantes del Colegio de Bachilleres número 26 caminan y toman el transporte por las laterales de la salida a Guadalajara en espacios de terracería, con pasto en algunos tramos. En tiempo de lluvia la zona es un lodazal.
Trabajadores de diferentes establecimientos comerciales que se ubican en la acera contraria señalan que la zona es peligrosa, especialmente de noche.
Saúl, empleado en un local comercial del perímetro, afirmó que el paso de hombres y mujeres que van a trabajar a residencias de la zona es constante, así como de los estudiantes de bachillerato y universitarios.
“Prácticamente van caminando al ras del arroyo vehicular, lo que los expone a un encontronazo con vehículos”, señaló Carolina madre de un estudiante del colegio ahí situado.
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