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Ciudad Valles.- Ante las continuas suspensiones de los trabajos de molienda en el Ingenio Plan de Ayala (IPA), el líder del grupo ejidal de Producción Cañera, Carlos Iván Torres Morales descartó que ésta sea una medida para boicotear el precio del Karbe y atribuyó el problema a las viejas instalaciones de la empresa.
Precisó que la zafra se extenderá hasta el 30 de mayo, y aunque no está dando el estimado por tonelada, aún se tiene un buen precio.
“Dentro de la zafra hay tiempos programados, ayer estaba programado un paro de la fábrica de ocho horas porque se arreglarían unos desperfectos, y con el propósito de no estar parando diariamente una hora, se llegó a un acuerdo con el ingenio, lamentablemente los camioneros han sido los más perjudicados, pero nosotros como productores dudamos que se trate de un boicot para que la producción baje y por consiguiente el precio también”, señaló.
Explicó que al Ingenio le cuesta mucho tener a los trabajadores parados, “se hablaba también de un sabotaje contra la empresa por personal que trabajaba antes, pues el nuevo gerente vino a hacer una limpia y quitar situaciones y costumbres que había antes, como los tiempos extras de los trabajadores, compromisos de dinero, etcétera”.
El líder cañero destacó que sí es preocupante la situación porque los tiempos programados están en su límite y posiblemente las cañas que se queden las pague el ingenio al 100 por ciento, aunque aún hay tiempos perdidos que están dentro de la Ley y que puede justificar la empresa.
Informó que la semana pasada se tuvo una reunión con todos los dirigentes de Alianza Popular y del Plan de Ayala, así como directivos de las fábricas y del corporativo del Grupo Santos, para dialogar sobre las inconformidades que se tenían de la molienda, y en un recorrido que se hizo por la empresa se mostró las reparaciones que se han hecho y los gastos que éstas han generado, además de que les anunciaron una inversión de 2 millones de dólares para el próximo año.
“Las pérdidas empezaron desde que iniciamos un mes tarde a zafrear, la caña bajó de peso, bajó calidad, tenemos camiones con cinco y seis días dentro del ingenio, les llevamos una comida (a los choferes), son costos que le pegan al productor y a las cañeras, sí hay pérdidas muy grandes, los tiempos que se marcan de fábrica llevamos quinientas setenta horas y hay un aproximado de setecientas horas, de campo alrededor de dieciocho horas y tenemos como más de trescientas que nos sobran; tenemos paros registrado de veintiocho horas por lluvias cuando el límite es de doscientos cuarenta, lo único que tenemos en el límite son los tiempos de fábrica, y ahorita quien la lleva más de perder es el Ingenio porque nos tendrá que pagar al cien por ciento las pérdidas, con el precio de ciento treinta y ocho punto noventa y cuatro, un precio que no teníamos en los últimos seis años”, puntualizó.
Precisó que la zafra se extenderá hasta el 30 de mayo, y aunque no está dando el estimado por tonelada, aún se tiene un buen precio.
“Dentro de la zafra hay tiempos programados, ayer estaba programado un paro de la fábrica de ocho horas porque se arreglarían unos desperfectos, y con el propósito de no estar parando diariamente una hora, se llegó a un acuerdo con el ingenio, lamentablemente los camioneros han sido los más perjudicados, pero nosotros como productores dudamos que se trate de un boicot para que la producción baje y por consiguiente el precio también”, señaló.
Explicó que al Ingenio le cuesta mucho tener a los trabajadores parados, “se hablaba también de un sabotaje contra la empresa por personal que trabajaba antes, pues el nuevo gerente vino a hacer una limpia y quitar situaciones y costumbres que había antes, como los tiempos extras de los trabajadores, compromisos de dinero, etcétera”.
El líder cañero destacó que sí es preocupante la situación porque los tiempos programados están en su límite y posiblemente las cañas que se queden las pague el ingenio al 100 por ciento, aunque aún hay tiempos perdidos que están dentro de la Ley y que puede justificar la empresa.
Informó que la semana pasada se tuvo una reunión con todos los dirigentes de Alianza Popular y del Plan de Ayala, así como directivos de las fábricas y del corporativo del Grupo Santos, para dialogar sobre las inconformidades que se tenían de la molienda, y en un recorrido que se hizo por la empresa se mostró las reparaciones que se han hecho y los gastos que éstas han generado, además de que les anunciaron una inversión de 2 millones de dólares para el próximo año.
“Las pérdidas empezaron desde que iniciamos un mes tarde a zafrear, la caña bajó de peso, bajó calidad, tenemos camiones con cinco y seis días dentro del ingenio, les llevamos una comida (a los choferes), son costos que le pegan al productor y a las cañeras, sí hay pérdidas muy grandes, los tiempos que se marcan de fábrica llevamos quinientas setenta horas y hay un aproximado de setecientas horas, de campo alrededor de dieciocho horas y tenemos como más de trescientas que nos sobran; tenemos paros registrado de veintiocho horas por lluvias cuando el límite es de doscientos cuarenta, lo único que tenemos en el límite son los tiempos de fábrica, y ahorita quien la lleva más de perder es el Ingenio porque nos tendrá que pagar al cien por ciento las pérdidas, con el precio de ciento treinta y ocho punto noventa y cuatro, un precio que no teníamos en los últimos seis años”, puntualizó.
