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Unos cinco mil feligreses salvadoreños viajaron a Roma para participar en la ceremonia de canonización de Óscar Arnulfo Romero, durante la cual el Papa Francisco declarará como santo de la Iglesia al “obispo de los pobres”.
Según las estimaciones de la Congregación para las Causas de los Santos del Vaticano, se esperan unas 70 mil personas para la misa que presidirá Francisco en la Plaza de San Pedro la mañana del próximo domingo 14 de octubre.
En la misma ceremonia, también serán elevados al honor de los altares el Papa Pablo VI, los sacerdotes italianos Francesco Spinelli y Vincenzo Romano, las religiosas María Caterina Kasper y Nazaria Ignazia March Mesa, y el joven napolitano Nunzio Sulprizio.
Para la ocasión, Jorge Mario Bergoglio utilizará el cíngulo que llevaba puesto el arzobispo de San Salvador justo cuando lo asesinaron, el 24 de marzo de 1980, en la capilla del Hospital La Providencia de la capital del país.
Aquel día, un francotirador que aún permanece anónimo, disparó al clérigo cuando estaba sobre el altar, hiriéndolo de muerte. El cordón que le sujetaba el alba, y que todavía se encuentra ensangrentado, fue traído a Roma para esta ocasión.
Fue el mismo pontífice quien solicitó la reliquia, según reveló en conferencia de prensa el cardenal Gregorio Rosa Chávez, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de San Salvador y uno de los sacerdotes más cercanos al mártir.
Con motivo de la canonización, en la capital italiana se organizó una “semana de Romero” quien, por cierto, vivió varios años en esta ciudad donde estudió como interno del Pontificio Colegio Pío Latinoamericano.
Los festejos por el primer santo salvadoreño comenzaron la víspera, jueves 11 de octubre, con un festival donde se presentaron los grupos de baile folclórico “Los Catrachos” (Honduras) y “Viva Panamá” (Panamá), además del grupo Gen Verde (Italia), así como los cantantes Inés De Viaud (El Salvador) y Luis Alfredo Díaz (España).
Este viernes siguen las actividades con la exposición multimedia “Voz de los sin voz, te prestamos nuestra voz”, que muestra de manera interactiva cómo los medios de comunicación a nivel mundial informaron sobre el asesinato de Romero en 1980.
La muestra, colocada en una sala a pocos metros de la Plaza de San Pedro, estará acompañada por la conferencia: “Vida, pasión y muerte del profeta”.
Por la mañana de este sábado 13 de octubre, una escultura de Óscar Romero, obispo y mártir, será develada en el Jardín “El Salvador” del barrio EUR, al sur de Roma y, por la noche, tendrá lugar una vigilia de oración en la Piazza di Campitelli, también en la capital italiana.
Tras participar en la canonización, la mañana del domingo en San Pedro, ese mismo día los fieles salvadoreños se reunirán para rezar la Coronilla de la Divina Misericordia, a las 15:00 horas local (14:00 GMT) en la Iglesia de Santo Spirito in Sassia, a poca distancia de la plaza vaticana.
El lunes celebrarán una misa de acción de gracias por la declaratoria del nuevo santo en el Aula Pablo VI del Vaticano y al concluir, el Papa Francisco dirigirá unas palabras a la delegación.
Según las estimaciones de la Congregación para las Causas de los Santos del Vaticano, se esperan unas 70 mil personas para la misa que presidirá Francisco en la Plaza de San Pedro la mañana del próximo domingo 14 de octubre.
En la misma ceremonia, también serán elevados al honor de los altares el Papa Pablo VI, los sacerdotes italianos Francesco Spinelli y Vincenzo Romano, las religiosas María Caterina Kasper y Nazaria Ignazia March Mesa, y el joven napolitano Nunzio Sulprizio.
Para la ocasión, Jorge Mario Bergoglio utilizará el cíngulo que llevaba puesto el arzobispo de San Salvador justo cuando lo asesinaron, el 24 de marzo de 1980, en la capilla del Hospital La Providencia de la capital del país.
Aquel día, un francotirador que aún permanece anónimo, disparó al clérigo cuando estaba sobre el altar, hiriéndolo de muerte. El cordón que le sujetaba el alba, y que todavía se encuentra ensangrentado, fue traído a Roma para esta ocasión.
Fue el mismo pontífice quien solicitó la reliquia, según reveló en conferencia de prensa el cardenal Gregorio Rosa Chávez, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de San Salvador y uno de los sacerdotes más cercanos al mártir.
Con motivo de la canonización, en la capital italiana se organizó una “semana de Romero” quien, por cierto, vivió varios años en esta ciudad donde estudió como interno del Pontificio Colegio Pío Latinoamericano.
Los festejos por el primer santo salvadoreño comenzaron la víspera, jueves 11 de octubre, con un festival donde se presentaron los grupos de baile folclórico “Los Catrachos” (Honduras) y “Viva Panamá” (Panamá), además del grupo Gen Verde (Italia), así como los cantantes Inés De Viaud (El Salvador) y Luis Alfredo Díaz (España).
Este viernes siguen las actividades con la exposición multimedia “Voz de los sin voz, te prestamos nuestra voz”, que muestra de manera interactiva cómo los medios de comunicación a nivel mundial informaron sobre el asesinato de Romero en 1980.
La muestra, colocada en una sala a pocos metros de la Plaza de San Pedro, estará acompañada por la conferencia: “Vida, pasión y muerte del profeta”.
Por la mañana de este sábado 13 de octubre, una escultura de Óscar Romero, obispo y mártir, será develada en el Jardín “El Salvador” del barrio EUR, al sur de Roma y, por la noche, tendrá lugar una vigilia de oración en la Piazza di Campitelli, también en la capital italiana.
Tras participar en la canonización, la mañana del domingo en San Pedro, ese mismo día los fieles salvadoreños se reunirán para rezar la Coronilla de la Divina Misericordia, a las 15:00 horas local (14:00 GMT) en la Iglesia de Santo Spirito in Sassia, a poca distancia de la plaza vaticana.
El lunes celebrarán una misa de acción de gracias por la declaratoria del nuevo santo en el Aula Pablo VI del Vaticano y al concluir, el Papa Francisco dirigirá unas palabras a la delegación.
