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Ciudad de México. - En menos de un año Jorge Antonio Guerrero Martínez pasó de ser un novel actor que estudió artes marciales y jugó futbol en tercera y segunda división a desfilar por la alfombra roja del Oscar y próximamente dará vida al príncipe tlaxcalteca Xicoténcatl en la nueva serie de época sobre la conquista de Hernán Cortés que prepara Azteca.
“No planeaba ser actor, el éxito es una consecuencia de un modo de vida y curiosamente es similar a la vida de mi personaje Fermín en ‘Roma’, ya que le debo mucho al arte marcial y a mi maestro que puso un libro en mi cuarto e insistía en que lo leyera y nunca hacía caso. “Él tuvo el buen gesto de comprarme buenos libros, los clásicos, y meterlos en mi cuarto; los fui leyendo y para mí eso fue un gesto grande que me gustaría repetir con alguien”.
El camino de Guerrero hacia las artes escénicas no siempre fue tan claro, ya que de jugar futbol de forma profesional pasó a la danza y artes marciales para finalmente llegar a la carrera de Letras en la UAM, lo cual afirma le abrió el camino a la interpretación.
“Pude haber inciado en la actuación más chico, pero soy de Ecatepec, Jaltengo y en esa época en mi cosmovisión, cuando estaba en prepa, hice danza y toda la invitación escénica la enfoqué en el futbol; pude haber debutado en primera división, estuve en tercera y en segunda, eventualmente me acerqué a las letras, ese fue el camino para dejar el deporte y darle camino a esta intuición poética que me llevó a estar frente a un público”.
PERSONAJES
Esa voz que lo llamó a ser actor hizo que en un corto tiempo haya desempeñado papeles como el “cadete Tello” en “Luis Miguel: la serie”, halcón en “Roma”, y ahora da vida a tres personajes en Netflix, “Historia de un crimen: Colosio”, entre ellos, a Mario Aburto.
Es justo este personaje al que logró encontrarle el lado humano y tener una visión distinta a lo que había escuchado, incluso dijo que logró por su trabajo empatizar con él.
Dijo que previo a la filmación se propuso no dejarse intimidar por el personaje al que iba a dar vida ni sentir presión por lo que la gente pudiera pensar sobre su trabajo en esta serie.
“Siempre tuve claro que no sentiría la presión social que tiene la figura de Mario se involucrara al grado que dejara de disfrutar lo que hacía, y en eso me ayudó el equipo”.
Aunque ninguno de los papeles que ha interpretado es protagonista, dijo que darles vida como si fueran los centrales ha hecho que, por su trabajo, sus alter egos empaticen con el público.
“No busco papeles porque crea que tendrán éxito o no. Para mí cada personaje se siente protagonista, cada personaje tiene su propia narrativa, al final el que tiene más número de conflictos es el que más tiempo en cámara”.
Esa racha de papeles coyunturales parece que seguirán en la carrera del actor de 26 años ya que ahora filma la serie “Hernán Cortés, el hombre”, en donde comparte créditos con Oscar Jaenada y en donde interpreta a Xicoténcatl.
