Importancia del colágeno en el cuidado de la piel

CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 4 (EL UNIVERSAL).- La piel de las personas requiere de cuidados especiales en todas las estaciones del año, pero es importante prestarle mayor atención cuando las temperaturas son muy elevadas, señala el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social de Paraguay. La protección solar, su hidratación y una alimentación balanceada son claves en este objetivo.

Desde el Instituto Mayo Clinic destacan que un buen cuidado de la piel y elegir un estilo de vida saludable pueden ayudarnos a retrasar el envejecimiento natural y prevenir diversos problemas de la piel. Al respecto, recomienda usar protector solar, no fumar, tratar la piel con cuidado, tener una alimentación saludable y controlar el estrés.

En cuanto a la alimentación, Mayo Clinic indica que lo ideal es consumir muchas frutas, verduras, granos integrales y proteínas magras. Además, hacer hincapié en alimentos que contengan y promuevan la producción de colágeno es fundamental para cuidar la piel, las articulaciones y los músculos.

El Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo de México afirma que el colágeno es una proteína que posee una estructura fibrosa conformada por tres cadenas de aminoácidos que se estructuran en forma de una triple hélice. Estas cadenas confieren al colágeno su habilidad de proveer estructura en los tejidos en los que está presente y la piel es uno de ellos.

En esta oportunidad, te contamos que si buscas cuidar tu piel a través de la alimentación la membrana que recubre la cáscara del huevo es un alimento que no deberías desechar. Esta está compuesta por ácido hialurónico, colágeno y glucosaminoglicanos, que le otorgan propiedades positivas para lograr una piel joven, según precisa un informe del Instituto Andaluz de Ciencias de la Tierra.

La membrana de la cáscara del huevo protege los tejidos de la piel, manteniéndolos hidratados y firmes. Además, promueve la regeneración de los huesos, por lo que incluirla en nuestra alimentación puede convertirse en un hábito muy saludable.