Romeo y Julieta, un ballet apasionado

Ovacionan a la Compañía Nacional de Danza

Compartir:

Romeo y Julieta, un ballet apasionado

A-AA+

Ciudad de México.- La trágica historia de amor de William Shakespeare fue interpretada una vez más en el Palacio de Bellas Artes, a modo de ballet por la Compañía Nacional de Danza como parte de su temporada de otoño, con la coreografía de Jane Bourne, basada en la versión de John Cranko. 

Una plaza colorida situada en Verona, Italia, a principios del Renacimiento fue la escenografía del primer acto, donde cerca de 40 bailarines con coloridos atuendos diseñados por Elisabeth Dalton pasan de la diversión a las peleas de espadas entre las poderosas familias Capuleto y Montesco: el saldo es un muerto por cada bando. 

En dicha disputa dancística al ritmo de la música de Serguei Prokofiev, interpretada en vivo por la Orquesta del Teatro de Bellas Artes bajo la batuta de Jonas Albert —la cual se colocó bajo el escenario principal—, se vieron involucrados Romeo y sus amigos Mercurio y Benvolio, hasta que intervino el Duque de Verona.  Entonces, la sencilla pero espectacular escenografía también de Dalton pasó a ser el interior de un castillo en donde Julieta recibe de su madre un hermoso vestido para su primer baile, lo cual celebra con piruetas frente a su nodriza y principal cómplice; más tarde, ya en la fiesta conoce a Romeo, quien se había colado al baile junto con sus amigos, usando antifaces para pasar desapercibidos. 

El amor entre los jóvenes es inmediato; sin embargo, los padres de Julieta ya tienen decidido su destino al lado de Paris, con quien baila hasta escabullirse para encontrarse con Romeo pero es descubierto por su primo Teobaldo, retándolo así a un duelo de espadas que detiene Lord Capuleto y entonces se marcha. 

ARGENIS MONTALVO

Romeo, fue protagonizado por el bailarín Argenis Montalvo, regresa al castillo en donde encuentra a Julieta (Elisa Ramos) en el balcón, en donde ambos se juran amor en medio de un baile apasionado, con lo cual concluye el primer acto de 55 minutos de duración y algunos asistentes aprovechan el intermedio para estirar las piernas o comprar alguna bebida.

Un amor que habita en el territorio de la muerte

El segundo acto de media hora comienza de nuevo en una gran fiesta porque es tiempo de Carnaval, aunque Romeo está triste por estar lejos de su amada, hasta que la nodriza aparece y le entrega una carta de ella en donde accede a casarse con él, por lo cual su humor cambia y se prepara para ir a buscarla a la iglesia donde se encuentra con San Lorenzo. 

Sin embargo, de nuevo la alegría se torna en drama pues Teobaldo aparece para continuar la pelea inconclusa; pero es Mercurio quien decide aceptar el duelo en el cual termina muerto, por lo que Romeo decide enfrentarlo y lo mata para vengar a su amigo. Cuando la madre de Julieta se entera del crimen maldice a Romeo por la muerte de su sobrino y lo destierra.