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Ciudad Valles.- El director de Obras Públicas del Ayuntamiento, Alberto Machuca Flores dijo que han descubierto seis tomas clandestinas que “huachicolean” el agua de una toma que su oficina utiliza como surtidor del vital líquido cuando falla la línea principal y apenas están investigando hacia qué ranchos van a parar los tubos para denunciar a los que él llamó “bandidos”.
Lo que ha indagado en primera instancia es que los mismos comisariados ejidales le han comentado que el agua la “huachicolean” algunos ganaderos y cañeros que tienen ranchos en la región para mantener sus presas con suficiente agua y así dar de beber al ganado y mantener las cañas en buen estado.
Ayer, otra vez amanecieron sin agua en la zona tének, después de tener suministro el fin de semana y luego de haber pasado dos meses sin el vital líquido.
La pérdida de fuerza de la tubería, por las tomas clandestinas podría estar causando que los tanques elevados no se llenen. Algunos ganaderos y cañeros podrían estar causando ese desabasto, “estamos investigando quiénes son”.
Ayer por la mañana, a través de un boletín, la dirección de Comunicación Social del Ayuntamiento, informó que a la altura del Camino Real El Ojite-La Pitaya encontraron que la válvula del viejo sistema de agua —ya clausurado— estaba abierta, impidiendo que el depósito general almacenara los 50 mil litros que necesita para ser enviada a presión a los tanques elevados de los ejidos.
Ahora la jefatura de prensa del Ayuntamiento supone que “alguien” abrió una válvula a propósito para huachicolear el agua hacia otros terrenos, pero no aclara si este desvío es lo que ha dejado sin líquido a los indígenas durante semanas y si el delito es obra de algún dueño de ranchos ganaderos que están antes de la primera comunidad indígena.
