A-AA+
JERUSALÉN (EFE).- Amnistía Internacional (AI) reivindicó hoy "la necesidad urgente de un embargo de armas a Israel" ante el primer aniversario de las protestas de la Gran Marcha del Retorno en Gaza, ocasión para la que está convocada una movilización este sábado que se prevé multitudinaria.
La organización defensora de los derechos humanos pide a Israel que "no haga un uso excesivo de la fuerza durante las manifestaciones", en las que se espera que miles de personas protesten ante la valla de separación entre la franja e Israel para exigir el fin del bloqueo israelí y el retorno de los refugiados palestinos, unas movilizaciones que se repiten cada semana desde que comenzaron a finales de marzo de 2018.
AI denuncia la muerte por fuego israelí durante 2018 de 195 personas, entre ellas 41 menores, y critica que "al menos 6,000 palestinos de Gaza resultaron heridos por munición real y 122 de ellos, incluidos 21 niños, sufrieron amputaciones de alguna extremidad".
"La naturaleza horrible de las heridas infligidas por las fuerzas israelíes a los manifestantes palestinos en Gaza durante el pasado año sugiere que Israel persiguió una estrategia deliberada para mutilar a civiles", según Saleh Higazi, director adjunto de AI para Oriente Medio y el norte de África.
En un comunicado, la organización se hace eco de un informe de una comisión investigadora de Naciones Unidas de finales de febrero que argumentó que las acciones israelíes hacia los manifestantes de la Gran Marcha del Retorno podían constituir "crímenes de guerra".
"Una y otra vez las autoridades israelíes han mostrado un desprecio cruel por la vida de las personas en Gaza", condena AI, que apela a "los gobiernos de todo el mundo, incluidos Estados Unidos y la Unión Europea, a imponer un embargo armamentístico general a Israel".
Por su parte, Médicos Sin Fronteras (MSF) alerta hoy en un comunicado de que, tras un año de protestas, "el coste médico, humano y económico es ya insoportable por un enclave bloqueado donde miles de personas no reciben atención, pese a sufrir heridas devastadoras".
Hasta ahora, las movilizaciones se han saldado con más de 260 palestinos muertos en enfrentamientos y más de 10 mil heridos por disparos.
Desde su comienzo el 31 de marzo de 2018, las protestas se han intercalado con ocho escaladas militares entre las milicias palestinas de Gaza e Israel -la última esta semana- con proyectiles hacia territorio israelí y bombardeos israelíes sobre la franja.
El Ejército israelí ha aumentado las medidas de seguridad en la línea la divisoria con Gaza ante las protestas del próximo sábado y se mantiene en alerta tras la última escalada de tensión de esta semana, con un mayor despliegue de sus tropas en la zona.
