Ashley Moody: Nueva Senadora en Florida

TALLAHASSEE, Florida, EE.UU. (AP) — La fiscal general de Florida, Ashley Moody, ocupará el escaño de Marco Rubio en el Senado de Estados Unidos, anunció el jueves el gobernador Ron DeSantis, convirtiendo a Moody en la segunda mujer en representar a Florida en esa cámara.

Elegida como la principal funcionaria de aplicación de la ley del estado en 2018, Moody hizo campaña con la promesa a los votantes de que será fiscal, no política. Pero junto con DeSantis, aumentó su perfil político durante el inicio de la pandemia de COVID-19, pidiendo al gobierno federal que "hiciera responsable a China" por el brote.

Al elevarla a este puesto, DeSantis elogió a Moody como una figura clave en sus batallas políticas, una fiscal de ley y orden que está preparada para ayudar al presidente electo Donald Trump a "asegurar y cerrar la frontera", controlar la inflación y reformar lo que describió como una burocracia federal "descontrolada".

"Estoy lista para presentarme y luchar por esta nación y por el presidente Trump para implementar la agenda de America First desde el primer día", dijo Moody durante el anuncio del jueves en un hotel en Orlando.

"La única manera de devolver este país al pueblo, al pueblo que lo gobierna, es asegurarnos de tener un Congreso fuerte que haga su trabajo, que apruebe leyes y realmente apruebe las regulaciones que estos burócratas no electos están tratando de imponer al pueblo estadounidense", agregó.

Antes de postularse para un cargo estatal, Moody fungió como fiscal federal. En 2006, fue elegida para el cargo de jueza de circuito en el condado Hillsborough, hogar de Tampa. Nativa de quinta generación de Plant City, Florida, Moody fue nombrada reina del famoso festival de fresas de la ciudad. Se graduó tres veces de la Universidad de Florida y ella y su esposo, un agente policial, tienen dos hijos.

Como fiscal general del estado, Moody ha sido instrumental en defender la agenda conservadora de DeSantis en los tribunales y se ha unido a otros estados liderados por republicanos para desafiar las políticas del gobierno de Joe Biden, demandando por cambios en la aplicación de la ley de inmigración, el perdón de préstamos estudiantiles y los mandatos de vacunas para contratistas federales.

"Me complace decir que hemos tenido una fiscal general que es alguien que ha actuado una y otra vez para apoyar los valores que todos compartimos", dijo DeSantis. "En Florida, establecimos nuestro estado como un baluarte de la libertad, como el estado libre de Florida. Y ella estuvo con nosotros en cada paso del camino".

Moody no es la única fiscal general del estado que ha utilizado la fiscalía como trampolín hacia un cargo nacional. Su predecesora, Pam Bondi, es la elección de Trump para liderar el Departamento de Justicia y está testificando el jueves en el Senado.

Según la ley de Florida, correspondía al gobernador republicano elegir al reemplazo de Rubio después que Trump seleccionara al senador de tres mandatos para ser su próximo secretario de Estado. Moody servirá en el Senado hasta la próxima elección general en 2026, cuando el escaño volverá a estar en la boleta.

Moody ha utilizado la fiscalía para defender a Trump, persiguiendo un caso penal contra un hombre acusado de intentar asesinar a Trump en su club de campo en West Palm Beach en septiembre. También estuvo entre los fiscales generales estatales que firmaron la demanda respaldada por Trump destinada a anular la victoria electoral de Joe Biden en 2020.

La fiscal general también luchó sin éxito para mantener una medida de derechos de aborto fuera de la boleta en Florida en 2024, diciendo que los proponentes estaban librando "una guerra" para proteger el procedimiento. La medida sí se presentó a los votantes pero finalmente no logró obtener la aprobación del 60% necesaria para pasar.

Moody podría desempeñar un papel clave en las audiencias para los nominados al gabinete de Trump, algunos de los cuales se espera que enfrenten un camino difícil para la confirmación.

Los republicanos tienen una mayoría estrecha en el Senado, 53-47, pero se redujo a 52 después que el vicepresidente electo JD Vance renunciara a su escaño la semana pasada antes de asumir el cargo. Eso significa que los nominados de Trump necesitan el apoyo de casi todos los senadores republicanos para la confirmación por mayoría frente a las objeciones de los demócratas.

El senador estatal republicano Joe Gruters, un aliado clave de Trump en el estado, fue uno de los que impulsó a la nuera del presidente electo, Lara Trump, como su principal elección para el escaño en el Senado. Lara Trump se retiró de la consideración en diciembre.

Sin embargo, Gruters elogió a Moody, llamándola "una ganadora aquí en Florida".

"Ella es muy popular. Y creo que la gente ve el trabajo que hace y aprecia su trabajo y su esfuerzo por tratar de... mantener Florida segura", dijo Gruters antes del anuncio.

El nombramiento de Moody abre una vacante clave en el gabinete de Florida, lo que da a DeSantis otra oportunidad de expandir su influencia en el estado. DeSantis también elegirá un reemplazo para el saliente director financiero Jimmy Patronis, quien dejará su cargo para postularse por el escaño abierto del exlegislador Matt Gaetz en el Congreso