Nuevo método de control térmico para prever sismos en Campos Flégreos

Roma, 24 mar (EFE).- Investigadores del Instituto de Geofísica y Vulcanología italiano (INGV) han desarrollado un nuevo método de control térmico que puede prever sismos en los Campos Flégreos, en provincia de Nápoles (sur), una de las zonas volcánicas más activas del mundo, a partir del análisis de imágenes de la temperatura obtenidas desde la Estación Espacial Internacional.

Un estudio del INGV publicado este lunes explica el desarrollo de un nuevo método de análisis de imágenes térmicas tomadas desde el espacio, capaz de detectar variaciones significativas de temperaturas que preceden a los terremotos más intensos en la zona flégrea, en la provincia de Nápoles.

El nuevo método usa los datos térmicos recogidos por el Ecostress, un sensor de la agencia espacial estadounidense (NASA) con alta resolución espacial que permite medir la temperatura superficial con una precisión de 70 metros, para encontrar diferencias de temperatura.

Este avance podría mejorar la predicción de terremotos en la región, situada en la provincia de Nápoles que recientemente ha experimentado un aumento en la actividad sísmica debido al fenómeno del bradisismo, que deforma el suelo por la acumulación de magma y gas en el subsuelo, provocando continuos temblores.

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Los Campos Flégreos, una enorme caldera volcánica ubicada bajo el mar, es una zona de alta actividad sísmica, con múltiples cráteres activos, ha registrado en las últimas semanas varios temblores, incluido uno de magnitud 4,6 el 13 de marzo, que obligó al desalojo de casi 400 personas, aunque sin víctimas mortales.

El análisis de dos series históricas de temperatura entre 2021 y 2024 ha mostrado que los aumentos de temperatura en ciertas áreas preceden a los eventos sísmicos más significativos, explicó el INGV en la nota.

Un ejemplo de la efectividad del método es el sismo ocurrido el 17 de mayo de 2024, cuya magnitud 4.4 fue anticipada por un aumento de temperatura de 5°C registrado tres días antes.

De manera similar, el sismo de magnitud 4.2 ocurrido el 27 de septiembre de 2023 fue precedido por un incremento térmico de más de 7°C el 21 de septiembre.

El estudio también demuestra que las anomalías térmicas coinciden con el aumento de otros fenómenos geofísicos observados en la zona, como el bradisismo y la emisión de dióxido de carbono.

"Hemos detectado variaciones anómalas de temperatura en la zona de emisión de la Solfatara que precedieron algunos terremotos de mayor intensidad, con una anticipación que va desde unos pocos días hasta unas pocas semanas", explicó Alessandro Piscini, investigador del INGV y uno de los autores del artículo, en la nota.

Cristiano Fidani, coautor de la investigación, agregó que los resultados obtenidos refuerzan la hipótesis de un posible vínculo entre las fluctuaciones de temperatura y la actividad sísmica en la zona.

El avance en el uso de datos espaciales abre nuevas posibilidades para la vigilancia y prevención sísmica, una demanda creciente entre los vecinos de la zona, que recientemente se manifestaron tras los episodios sísmicos.